El empresario Ricardo Salinas Pliego acusó al Gobierno federal de despojarlo de la concesión de un campo de golf en Huatulco, sólo por berrinche y capricho.
A través de sus redes sociales, arremetió contra la Secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, por ordenar el despliegue de la Guardia Nacional en la propiedad que, por decreto presidencial, ahora es un área natural protegida.
«Respecto al campo de golf, hay contratos legalmente firmados y concesiones vigentes que por ley se tienen que respetar para favorecer al Estado de Derecho», posteó.
«Si no imagínense el ejemplo que se daría a nivel internacional para los inversionistas y empresarios cuando claramente Luisa María Alcalde utiliza a la Guardia Nacional para despojar a un privado de una concesión válida, legal y vigente solo para cumplir un berrinche y un capricho».
Ayer, un grupo de 120 elementos de la Guardia Nacional llegó al campo de golf junto con funcionarios federales que realizaron notificaciones legales.
En febrero, el Presidente Andrés Manuel López Obrador exigió al dueño de TV Azteca el pago de impuestos y advirtió que el empresario se quedaría sin el campo de golf que le fue concesionado en Tangolunda en Huatulco, Oaxaca.
Hoy por la mañana, desde La Paz, Baja California, López Obrador aseguró que el campo de golf es propiedad de la Nación y no de Salinas Pliego.
Además, defendió la incursión de la Guardia Nacional porque se busca «proteger un bien público».
En respuesta, Salinas Pliego dejó en claro que se defenderá de manera legal ante las decisiones del Gobierno federal.
«Todos los mexicanos tenemos el mismo derecho a defendernos de los abusos cometidos por los #gobiernicolas y no vamos a aceptar que ningún grupito de resentidos sociales se consideren dueños de México y se quieran pasar las leyes por el arco del triunfo», afirmó.
Este viernes, el Jefe del Ejecutivo insistió en que la concesión otorgada al empresario se encuentra vencida y advirtió que la ampliación del contrato de concesión mostrada por Salinas Pliego fue dada por un funcionario que ya fue denunciado legalmente.
El dueño de Grupo Salinas consideró que ese argumento carece de validez.
«Ahora bien, si quien – por parte del Gobierno – firmó y extendió la concesión del campo, ahora resulta que era un ‘corrupto’ o inepto, eso está tantito peor, imagínense nada más que el mismo Gobierno acepte que sus representantes no son de fiar. Pues está de la jodida», agregó.