Cinco músicos. Cinco familias destrozadas. Y una comunidad entera en vilo. Lo que comenzó como una desaparición en extrañas circunstancias, ha evolucionado en una investigación criminal con tintes trágicos. En Reynosa, Tamaulipas, las autoridades investigan si cinco cuerpos calcinados hallados el miércoles 28 de mayo corresponden a los integrantes del Grupo Fugitivo, desaparecidos días antes.
¿Qué ocurrió la noche del 25 de mayo en Reynosa?
El Grupo Fugitivo, conocido por su trayectoria en la música norteña, tenía programada una presentación en la colonia Riberas de Rancho Grande. A las 21:00 horas, se perdió contacto con Francisco Xavier Vázquez Osorio, Nemesio Antonio Durán Rodríguez, Livan Edyberto Solís de la Rosa, Víctor Manuel Garza Cervantes y José Francisco Morales Martínez.
Desde entonces, familiares y amigos iniciaron una búsqueda desesperada, mientras que las autoridades se mantenían en silencio o lanzaban mensajes contradictorios.
Un hallazgo que cambia el rumbo de la investigación
El hallazgo de cinco cuerpos calcinados en un rancho de Reynosa, en un paraje alejado, a las 19:00 horas del miércoles 28 de mayo, ha despertado el temor de lo peor. Aunque la Fiscalía General de Justicia del Estado de Tamaulipas aún no ha confirmado oficialmente la identidad de los cuerpos, la coincidencia en el número y contexto ha generado consternación.
Aún más alarmante fue el descubrimiento previo de la camioneta en la que viajaban los músicos, encontrada sin logotipos ni el remolque donde transportaban sus instrumentos. Todo apunta a una posible acción del crimen organizado, aunque hasta ahora ninguna línea de investigación ha sido descartada.
Contradicciones y versiones encontradas
El caso ha generado indignación por la falta de información oficial y la manera irresponsable en la que algunos funcionarios han manejado el tema. El 27 de mayo, medios informaron que los músicos habían sido localizados con vida, supuestamente bajo custodia del gobierno. Sin embargo, los familiares desmintieron esta versión tajantemente.
“Reprochamos la información dada por el gobernador de Tamaulipas, donde dice que se encontraron los muchachos… Totalmente falso”, denunció Sony Bernal, exesposa de uno de los músicos, en entrevista con Azucena Uresti.
También cuestionó el audio difundido por el secretario de Seguridad del estado, quien afirmó que los músicos estaban camino a la fiscalía. Nada de eso ha sido confirmado por pruebas concretas.
La respuesta de la comunidad y la presión social
La noche del miércoles, mientras los rumores crecían, familiares, amigos y fans del Grupo Fugitivo realizaron una vigilia frente a la Concatedral de Reynosa. Con veladoras encendidas, oraciones y pancartas exigiendo justicia, la comunidad se unió en una sola voz: “Queremos la verdad y castigo a los responsables”.
Organizaciones de derechos humanos y colectivos artísticos también alzaron la voz, exigiendo que la fiscalía actúe con transparencia, responsabilidad y rapidez.
¿Qué sigue en el caso del Grupo Fugitivo?
La investigación sigue abierta. Aunque los indicios apuntan a un crimen de alto impacto, será fundamental que las autoridades actúen con rigor forense y ética informativa. Las pruebas de ADN serán claves para confirmar si los restos hallados pertenecen a los músicos.
Mientras tanto, crece la presión social y mediática para que el gobierno de Américo Villarreal Anaya y la Fiscalía estatal enfrenten este caso con seriedad y claridad.
La desaparición —y posible homicidio— de los integrantes del Grupo Fugitivo es un reflejo doloroso de la inseguridad que aún azota a Tamaulipas. Pero también es un llamado urgente a no olvidar que, detrás de cada caso, hay rostros, familias y sueños truncados.
