Noticias de Yucatán
(prepotencia, influyentismo, prd, impunidad)
En su columna "Templo Mayor", el diario dice que se trata de "todo un escándalo a meses sin intereses" que refleja cómo algunos funcionarios ligados al gobierno del Estado hacen "valer sus derechos al estilo yucateco".
(prepotencia, influyentismo, prd, impunidad)
El PRD advierte que la magistrada cometió un delito
Publicada: 27 diciembre 2011
Publicada: 27 diciembre 2011
Foto de archivo de una conferencia sobre problemas intrafamiliares ofrecida en la parroquia de Santa Rosa por la magistrada Ligia Cortés Ortega (1)
El presidente estatal del PRD, David Barrera Zavala, dice que es muy lamentable que la magistrada Ligia Cortés Ortega incurra en ese tipo de excesos y pide que se investigue a fondo el escándalo que protagonizó en una mueblería de Plaza Las Américas
"Al utilizar la fuerza pública sin el sustento legal correspondiente y ostentarse como autoridad de un Poder para conseguir un fin particular, la funcionaria incurrió en un delito y debe ser sancionada", indica el directivo.
Hace seis días, como informamos, la magistrada Cortés Ortega se presentó en una mueblería de esa plaza comercial y exigió, haciendo uso de la fuerza pública, que le devuelvan el importe de su compra, enojada porque no cumplieron con entregarle los muebles que adquirió en la fecha acordada.
Aunado a la condena pública por la actitud prepotente y el abuso de autoridad en que incurrió, la funcionaria violó, como publicamos ayer, el Código de Ética del Poder Judicial, en cuya elaboración y aprobación participó.
El Código dice que los magistrados deben evitar incurrir en actitudes que denoten alarde de poder o prepotencia y comportarse con decoro en su vida pública y privada, entre otros preceptos.
"Lo mínimo que debe tener la magistrada es congruencia, debe respetar el Código de Ética que ella misma elaboró", subraya David Barrera.
Sobre el tema, el presidente estatal del PAN, Hugo Sánchez Camargo, señala que es totalmente deplorable la actitud que mostró la magistrada Cortés Ortega y advierte que "ése es el problema cuando hay funcionarios que creen estar más allá del servicio público".
"Los servidores públicos están precisamente para servir no para servirse. Ocurre esto cuando creen estar más allá el bien y el mal y actúan con toda impunidad", subraya.
"Sí incurrió en un abuso de autoridad y amerita una sanción, pero el problema es: ¿quién la va a sancionar?.
"Esto ocurre también cuando los magistrados saben que son inamovibles, piensan que pueden abusar de su autoridad, pero se les olvida que ésta no es intrínseca sino que se les confiere por medio de la soberanía estatal", apunta.
"Hay que revisar el marco legal que rige la actuación de los servidores públicos de todos los poderes, comenzando con los del Judicial, que son los encargados de impartir justicia. Es una tarea pendiente.
"El problema cuando no hay una verdadera división de poderes y se entremezclan, en este caso, el Ejecutivo y el Judicial, es: ¿quién va a investigar y aplicar la sanción?.
"Estamos entrampados con esa falta de división de poderes, los ciudadanos estamos indefensos ante la fuerza arbitraria de la autoridad.
"Sirvan excesos como éstos para hacer un llamado a la conciencia de los yucatecos sobre qué tipo de autoridades queremos y nos merecemos. Autoridades que respeten la ley y velen por los intereses de los ciudadanos o autoridades que abusen del poder en su beneficio personal?".
"Justicia al estilo yucateco"
Publicada: 27 diciembre 2011
Publicada: 27 diciembre 2011
El escándalo protagonizado por la magistrada yucateca Ligia Cortés Ortega la semana pasada ha llamado la atención de la prensa nacional: ayer el diario capitalino "Reforma" se refirió al caso.
Escándalo a meses sin interés
Llega a la prensa del D.F. el caso de Ligia Cortés Ortega
Publicada: 27 diciembre 2011
Llega a la prensa del D.F. el caso de Ligia Cortés Ortega
Publicada: 27 diciembre 2011
Como "todo un escándalo a meses sin intereses" califica la columna Templo Mayor, del diario capitalino "Reforma", el escándalo ocasionado el pasado miércoles 21 por la magistrada Ligia Cortés Ortega, quien recurrió al uso de la fuerza pública para obligar a una mueblería a devolverle el dinero que pagó por un mueble que compró durante "El Buen Fin" y que, según versión de la funcionaria, no le fue entregado a tiempo.
De esta manera, el caso de la magistrada, que, además, violó el código de ética que ella misma aprobó, se convierte en otro escándalo de la actual administración local que trasciende al ámbito nacional.
A continuación, los párrafos de Templo Mayor que se refieren al caso yucateco:
"¿Compró en "el buen fin" unos muebles y no se los entregan? No se preocupe: haga valer sus derechos al estilo yucateco.
"Resulta que el otro día la magistrada Ligia Cortés, del Tribunal de Justicia de Yucatán, se tomó muy en serio aquello de hacer justicia por su propia cuenta.
"Debido a que una mueblería le había retrasado la entrega de una sala y un centro de entretenimiento, les cayó ¡con todo y agentes judiciales!
"Al grito de "la ley soy yo, ¡bomba!", la magistrada prácticamente tomó por asalto la tienda en un centro comercial de Mérida, a fin de exigir que le devolvieran su dinero.
"Por supuesto esta actitud le ha acarreado todo tipo de críticas tanto a la jurista como al gobierno de la priista Ivonne Ortega por prestarse al atropello. "Todo un escándalo a meses sin intereses".
De esta manera, el caso de la magistrada, que, además, violó el código de ética que ella misma aprobó, se convierte en otro escándalo de la actual administración local que trasciende al ámbito nacional.
A continuación, los párrafos de Templo Mayor que se refieren al caso yucateco:
"¿Compró en "el buen fin" unos muebles y no se los entregan? No se preocupe: haga valer sus derechos al estilo yucateco.
"Resulta que el otro día la magistrada Ligia Cortés, del Tribunal de Justicia de Yucatán, se tomó muy en serio aquello de hacer justicia por su propia cuenta.
"Debido a que una mueblería le había retrasado la entrega de una sala y un centro de entretenimiento, les cayó ¡con todo y agentes judiciales!
"Al grito de "la ley soy yo, ¡bomba!", la magistrada prácticamente tomó por asalto la tienda en un centro comercial de Mérida, a fin de exigir que le devolvieran su dinero.
"Por supuesto esta actitud le ha acarreado todo tipo de críticas tanto a la jurista como al gobierno de la priista Ivonne Ortega por prestarse al atropello. "Todo un escándalo a meses sin intereses".