A partir del próximo sábado 16 de febrero el pasaje de transporte urbano en la ciudad de Mérida bajará de precio, de 8 a 7.50 pesos, mientras que la tarifa social pasará de 3 a 2.50 pesos, según anunció el gobernador Mauricio Vila Dosal hace unos momentos.
El Ejecutivo estatal expresó los gobiernos anteriores no resolvieron las
problemáticas del transporte público y por lo tanto, hay una “deuda histórica”
con los usuarios, pues “siempre se les pide que paguen de más y se sienten a
esperar las mejoras, y éstas no siempre llegan”. Recalcó que hay deficiencias
en dicho servicio pero que los empresarios atraviesan una crisis ante el alza
en el costo de los combustibles y de las refacciones.
“Los precios del pasaje suben pero el servicio no ha mejorado. Es momento de
saldar esa deuda histórica. Siempre se privilegiaba a los empresarios
transportistas sin considerar a los usuarios; nosotros, por el contrario, vamos
a iniciar privilegiando a los usuarios”, declaró.
Vila Dosal informó que el decremento en los precios corresponde a cambios en la
entrega de apoyos para los concesionarios, ya que a diferencia de administraciones
anteriores en las que la bolsa de 16 millones de pesos se repartía a a las
empresas de acuerdo al número de unidades que tenían, ahora los subsidios se
entregarán según el número de usuarios que utilicen los vehículos. Las empresas
que no se adhieran al programa no recibirán recursos.
Las nuevas tarifas serán aplicadas a las rutas de la Alianza de Camioneros de
Yucatán, la Unión de Camioneros, Minis 2000 y Rápidos de Mérida, compañías que
ostentan el 90 por ciento de las unidades que circulan en la capital yucateca.
El gobernador invitó a las empresas que no se han sumado al esquema a que lo
hagan, ya que los yucatecos destinan hasta el 50 por ciento del ingreso
familiar al servicio de transporte.
A su vez, comentó que los subsidios no serán un cheque en blanco, ya que de
acuerdo al servicio será la demanda de los usuarios, quienes podrán exigir un
mejor trato. "El transporte público debe ir para adelante, nunca más en
retroceso. Tiene que ir para adelante en mejorar el servicio. La meta a mediano
y largo plazo es que los yucatecos tengan un verdadero sistema de movilidad que
les permita llegar a los hogares y trabajos de manera segura y puntual",
sostuvo.
De igual forma descartó que, a diferencia de otras administraciones locales que
atendía los asuntos de transporte “por cuestiones políticas”, esta medida no se
trata de un "acto político".
Mejora de unidades no será inmediata
El director de la Coordinación Metropolitana de Yucatán (Comey), Aref Karam
Espósitos aclaró que la mejora de unidades no será una medida inmediata del
esquema de subsidios anunciado, ya que brindar mantenimiento a una unidad para
dejarla en óptimas condiciones toma al menos un mes o hasta dos si se requieren
intervenciones al motor.
“Esto tiene que ser gradual, no podemos de la noche a la mañana cambiar todas
las unidades porque tendríamos que sacarlas por dos meses”, detalló. Eso sí,
aseguró que el cambio de vehículos es un objetivo a mediano plazo, por lo que
las autoridades ya entablaron diálogo para priorizar la intervención en las
unidades que se encuentran en peores condiciones para mejorarlas
gradualmente.
A su vez, comentó que con el programa anunciado se buscará incentivar el uso
del transporte público por parte de personas con alguna discapacidad. “Por cada
persona con discapacidad estaremos apoyando, para que sea un transporte
inclusivo, esto implica muchas cosas a mediano plazo, no es inmediato, pero
queremos que cada día todos utilicen el transporte y ayudemos a equilibrar el
sistema”, sostuvo.
El funcionario agregó que el recurso para los subsidios se encuentra
contemplado en el presupuesto.
"No se excluye a nadie"
Las empresas que aún no se han sumado al programa, tal es el caso del grupo
independiente –antes Micro Expreso- de David Quintal Medina y del Frente Único
de los Trabajadores del Volante (FUTV).
El director de la COMEY recalcó que “no se excluye a nadie” y no quiso nombrar
a las empresas faltantes, ya que “hay varios grupos pequeños que están en el
proceso” y que tienen que analizar la información para tomar una decisión.
“Seguramente tienen retos internos, pero hemos tenido buena relación con el
Frente y con todas las asociaciones”, sostuvo.
Entrevistado al respecto, el director general de Minis 2000, Rafael Canto
Rosado, externó que se sumó a la propuesta porque “tiene la ilusión” de que sea
un cambio positivo, que resuelva la problemática del transporte, acabe con las
deficiencias “que nunca ha negado” que tiene el servicio y lo mejore por el
bien del usuario.