Mientras la economía informal crece sin medida en el Estado, y especialmente en esta ciudad, los últimos meses se registraron la pérdida de 10,000 empleos y el cierre de 3,700 empresas en el sector productivo local.
De acuerdo con cifras oficiales, de diciembre de 2009 a septiembre de 2010 el número de trabajadores disminuyó en 10,077 plazas.
En el mismo período se redujo el número de patrones, que pasó de 46,466 a 42,755.
Esta caída en las cifras de la economía formal y la proliferación de la informal parece no haber sido tomada en cuenta cuando se decidió aumentar el impuesto a las nóminas, que los empresarios han cuestionado.
(3)La decisión de aumentar el impuesto a la nómina ocurre en medio de una situación de apuro en el sistema productivo de Yucatán, caracterizado por la disminución de más de 10,000 plazas de trabajo y el cierre de 3,700 empresas en los últimos meses, según cifras oficiales.
La medida de la gobernadora Ivonne Ortega Pacheco, que ha causado una fuerte reacción entre la clase empresarial, insiste en aumentar la carga fiscal al sector formal de la economía, pero sin tocar al sector informal, que crece continuamente.
Según analistas consultados, esta medida incentivará aún más la evasión de ese impuesto, por medio de la subcontratación y el subregistro de los salarios reales, y entablará un prolongado, enconado y desgastante conflicto político entre el gobierno y el sector más poderoso de los empresarios, que no se veía desde hacía muchos años.
Cálculos preliminares estiman que tan sólo una docena de los empresarios que han manifestado públicamente su inconformidad contra el aumento de impuestos influirían en empresas que representan casi 30,000 empleos, el 75 por ciento de todos los empleos generados por las grandes empresas de Yucatán.
Como hemos informado, los diputados del PRI y uno del PRD aprobaron la iniciativa de Ley de Ingresos que presentó la gobernadora Ortega Pacheco en noviembre, que prevé un aumento del 2 al 2.5 por ciento al impuesto a la nómina.
El 18 de diciembre, en un acto sin precedente en los últimos años, el presidente, expresidentes y los miembros del actual consejo directivo de la Coparmex Mérida y más de 100 socios de esa agrupación reprobaron los aumentos y pidieron al gobierno transparencia en sus gastos antes de crecer la carga impositiva.
A esta inconformidad se sumaron casi todos los dirigentes empresariales. Uno de ellos, Gustavo Millet Reyes, presidente de la Cámara de la Industria del Vestido, propuso al Congreso disminuir el impuesto a la nómina de 2 a 1.5% y crear un IVA estatal de uno por ciento, para ampliar la base gravable, incluyendo al sector informal de la economía. La propuesta fue rechazada. El Congreso aprobó el aumento del impuesto a la nómina, luego de que de diciembre de 2009 a septiembre de 2010 el sistema productivo perdiera 10,077 plazas de trabajadores asalariados, al pasar esa cifra, según el Inegi, de 531,334 a 521,257.
En el mismo lapso ese organismo registró también la disminución del número de empleadores o patrones. En diciembre de 2009 había 46,466 empleadores o dueños de una empresa, y en septiembre la cifra disminuyó a 42,755, una caída de 3,711 negocios.
No obstante esta situación, el gobierno estatal decidió aumentar la carga fiscal sobre el sector formal de la economía y beneficiar fiscalmente, una vez más, al sector informal, que crece continuamente.
De septiembre de 2009 a septiembre de 2010, dice el Inegi, este sector, integrado por quienes realizan actividades económicas en los hogares sin pagar impuestos, aumentó de 289,258 a 308,342, un aumento de 19,084 personas.
A este segmento se le agrega el de los trabajadores domésticos remunerados, que también creció en el mismo periodo al pasar de 46,993 personas en septiembre de 2009 a 49,218 un año después. La mayoría de estos trabajadores no paga impuestos.
En total, el sector informal del empleo suma 357,560 personas en 2010, igual al 44.43% de todos los yucatecos que perciben un ingreso.
Según el economista Antonio Osorio Acevedo, director de Información Sistemática de la Península, la pretensión del gobierno de aumentar el impuesto a la nómina propiciaría una mayor evasión en el pago de ese gravamen.
"Desde hace muchos años y ahora con más razón, las empresas buscan aumentar la subcontratación de personal para evadir el pago de impuestos, por medio de compañías de 'outsourcing' o de otros subterfugios administrativos y fiscales".
Hay cifras nacionales según las cuales una de cada siete personas ocupadas en el país lo hace en una razón social distinta a la que trabaja, explica Osorio Acevedo.
-Una muestra de que el subregistro de empleados y de salarios se extiende por el Estado, dice, es el nivel diario promedio de cotización de los trabajadores en el IMSS. Este asciende a $173, el tercero más bajo de todo el país, contra un promedio nacional de $231.
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