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MÉXICO (Por Elia Baltazar/corresponsal Diario de Yucatán-AEE).- En el centro de Ichmul estaba a punto de comenzar una función de circo. Algunos de los más de 1,500 habitantes de la comunidad -ubicada en el municipio de Chikindzonot- esperaban el inicio del espectáculo, pero un imprevisto cambió los planes de la tarde de aquel domingo 22 de septiembre.
“Fueron dos fenómenos diferentes que coincidieron”, explicó el especialista.
Los lugareños recogieron varios fragmentos rocosos de tonos negro, azul y café. Al unirlos aseguraron que daban forma a figuras humanoides. Sin embargo, el especialista aclaró que lo que parece un humano en realidad son fulguritas, piezas vidriosas que se producen con la caída de rayos en terrenos arenosos.
Luego de la caída del objeto, habitantes de Ichmul reportaron un corte de energía eléctrica y la aparición de resplandores azules intermitentes. De acuerdo con Flores, la iluminación tipo azulosa está relacionada con la descarga por el contacto de los cables con la tierra.
Un objeto envuelto en fuego cayó a gran velocidad ante sus ojos. Meteorito, bola de fuego, asteroide o rayo. Difícil definirlo y hasta ahora ninguna autoridad ha explicado el origen de ese material rocoso caído del cielo.
Daniel Flores, investigador del Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), indicó que, de acuerdo con las imágenes e información que se han difundido, el objeto caído podría tratarse del fragmento de un bólido que chocó con unos cables de alta tensión y produjo un cortocircuito.
“Fueron dos”
El experto aseguró que el evento sucedido en Ichmul es un fenómeno completamente natural, que no ocurre de manera frecuente y que no representa un peligro.
“Son sucesos súbitos de los que eventualmente, dada la rapidez de las noticias que circulan en el mundo, uno sabe que suceden en diferentes partes”.
“Pero es la rapidez con que circulan las noticias la que nos hace creer que están ocurriendo más seguido, pero no es así”, afirmó.
“Como sucedió en Ichmul pudo haber pasado en cualquier Estado”, subrayó el investigador, quien aseguró que Yucatán no tiene ninguna particularidad para que haya ocurrido ahí la caída de las piezas.
Recordó que hace más de cinco años en Zacatecas se reportó un caso parecido. “Son hechos similares aunque son distantes en tiempo y localidad”.
Aseguró que en el Instituto de Astronomía de la UNAM están en espera de que en los próximos días les lleguen muestras del objeto para analizarlas.
“Esperamos que sea en dos días o tres para empezar a trabajar con ellas”, finalizó.
