Arcos de Mérida en el abandono

21 julio 2015
Noticias de Yucatán


El arco que está en la calle 50 con 61, en el centro de la ciudad, cerca de Mejorada, es un ejemplo del abandono de esas estructuras urbanas


Tres arcos coloniales de Mérida, lejos del atractivo arquitectónico que deben ser
A pesar de ser símbolos de Mérida y únicos en su tipo en todo el país, los tres arcos coloniales de esta ciudad no reciben el mantenimiento adecuado, en particular dos entre los barrios de Mejorada y San Cristóbal que están visiblemente abandonados, al grado que en uno de ellos crecieron plantas.
Los arcos denominados De Dragones y Del Puente muestran condiciones lastimosas. Hace tiempo que perdieron su pintura, tienen desprendimientos, grietas, moho y suciedad, y son afeados todavía más por grafitis, postes y otras instalaciones.
El tercer arco, en San Juan, está mejor conservado, pero ya requiere pintura.
La situación de los dos primeros es peor si se toma en cuenta que son parte de una zona de abandono, alrededor hay predios cerrados —en venta o renta— con sus fachadas sucias y deterioradas. En algunas de sus aceras hay basura.
Los inmuebles y esas estructuras coloniales forman así un conjunto en descuido y dan mala imagen al llamado Circuito Barrios, el cual debería ser un atractivo turístico.
El arco De Dragones está a cuatro esquinas de otro edificio colonial que debe ser rescatado, es la antigua capilla de San Juan de Dios, que durante mucho tiempo albergó al Museo de la Ciudad y permanece cerrado desde hace años. El predio está bajo posesión y administración del INAH, dependencia en la cual también recae la conservación de los arcos citados, pues son parte del patrimonio histórico del país.
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Deteriorados dos de ellos ubicados en céntrica zona

Antonio Peniche Gallareta, presidente saliente del Colegio Yucateco de Arquitectos, consideró que el INAH podría coordinarse con el Ayuntamiento para que los tres arcos coloniales de esta ciudad reciban mantenimiento constante.
Respecto al antiguo templo de San Juan de Dios, ubicado a cuatro esquinas del Arco de Dragones, dijo que se debería dar uso público y no mantenerlo cerrado más tiempo. En este caso el INAH es quien tiene la responsabilidad al respecto.
En recorridos a los tres arcos se observó que el de San Juan es el que luce conservado, aunque ya requiere pintura.
El arco del Puente, ubicado en la calle 50 con 63, se caracteriza por la cruz de piedra en su remate y dos pequeños pasadizos en sus bases para que la gente los atraviese y no tenga que bajar de la acera. Uno de esos pasos está obstruido parcialmente por un semáforo y tiene grafitis.
Ese arco está rodeado de siete edificios abandonados, algunos de ellos albergaron establecimientos comerciales cuyos nombres todavía pueden leerse en sus fachadas. Casi junto a él está también un paradero de taxis colectivos a Dzidzantún y un estacionamiento público que ya cerró.
Frente a la estructura colonial citada hay dos casonas cerradas desde hace mucho, con viejos letreros del Ayuntamiento que dicen que ambos están sometidos a procesos administrativos. En una de ellas la maleza que crece en el interior ya llegó a la calle y cubrió parte de los cables que cruzan la zona.
Entre los comercios que funcionaron en la zona y ahora están cerrados están Casa Díaz de Máquinas de Coser y Botanas Cruji-Man. A una esquina de ahí, en el cruce de las calles 63 y 48, hay un viejo predio tapiado por la Comuna y que ya perdió parte de sus techos.
En las aceras de la zona hay basura y crecen hierbas.
El arco de Dragones luce todavía más deteriorado. Hay plantas creciendo en su parte superior, los desprendimientos dejan ver las piedras que forman su estructura. Luce gris y aún puede apreciarse que alguna vez estuvo pintado de amarillo.
Está rodeado del Cuartel de Dragones, el bar La Mostachona, el edificio del Ciesas y una casona cerrada.
A diferencia del otro arco, en las inmediaciones hay mayor actividad comercial. Son pocos los predios cerrados.
Las dos construcciones coloniales citadas tienen letreros que los identifican como monumentos históricos y señalan que “Mérida es la única ciudad de México que conserva arcos edificados en la Colonia”. Se agrega que en la ciudad hubo ocho de esos monumentos.
Se explica también que el arco del Puente recibe ese nombre porque en ese sitio hubo una estructura que permitía cruzar la calle cuando esta se inundaba con las precipitaciones pluviales.
Respecto al ex templo de San Juan de Dios, donde por décadas funcionó el Museo de la Ciudad, al parecer sirve de bodega para el INAH.
Según nuestros archivos, el viejo museo que funcionó ahí fue remozado en 1994 y reinaugurado en enero de 1995. Habría estado activo hasta 2007, cuando el Museo de la Ciudad se trasladó a su actual edificio.
Según eso, ese predio ya tendría ocho años cerrado.— Hansel Vargas Aguilar
Estructuras Eran ocho
El cartel informativo de los arcos dice que eran ocho y ahora sólo quedan tres.
De Dragones y Del Puente
Están en la calle 50, el primero de ellos en el cruce con la 61 (lleva ese nombre porque está junto a lo que fue el Cuartel de Dragones de la Caballería) , y el segundo en la 63.
El Arco de San Juan
Esta estructura está en un extremo del parque de ese nombre.
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