El Ejército iraquí ha dado a conocer un impresionante vídeo que ha dado la vuelta al mundo en el que se observa a un soldado desarmando a un 'niño suicida'.
El menor llevaba material explosivo bajo una camiseta del equipo de fútbol inglés Chelsea, según informan medios británicos.
El niño, de unos 7 años, fue detenido en la ciudad iraquí de Mosul, donde la coalición internacional llevaba a cabo una dura batalla para liberarla del Estado Islámico.
En su declaración el niño aseguró que fue enviado por un combatiente del Estado Islámico con instrucciones precisas de acercarse a miembros del Ejército iraquí. Este se encontraba entre una multitud que intentaba escapar de una zona controlada por los extremistas.
En el vídeo se observa cómo el soldado iraquí al ver algo raro en el cuerpo del menor, lo ayuda a quitarse la camiseta.
El soldado le encuentra y desabrocha un cinturón explosivo pegado a su cuerpo, junto a un teléfono móvil y varias baterías.
Luego el hombre desconecta los cables conectados al artefacto y retira el dispositivo, mientras repite al niño que se mantenga tranquilo.
Más de 600.000 civiles aún permanecen aún atrapados en el sector occidental de Mosul, donde se libra una intensa batalla entre el Ejército iraquí y el Estado Islámico.
Desde que inició la operación para liberar esta ciudad se utiliza a los civiles como escudo humano y por ello más de 255 mil personas han sido desplazadas y unos 750 civiles han fallecido o han resultado heridos durante los ataques.
El menor llevaba material explosivo bajo una camiseta del equipo de fútbol inglés Chelsea, según informan medios británicos.
El niño, de unos 7 años, fue detenido en la ciudad iraquí de Mosul, donde la coalición internacional llevaba a cabo una dura batalla para liberarla del Estado Islámico.
En su declaración el niño aseguró que fue enviado por un combatiente del Estado Islámico con instrucciones precisas de acercarse a miembros del Ejército iraquí. Este se encontraba entre una multitud que intentaba escapar de una zona controlada por los extremistas.
En el vídeo se observa cómo el soldado iraquí al ver algo raro en el cuerpo del menor, lo ayuda a quitarse la camiseta.
El soldado le encuentra y desabrocha un cinturón explosivo pegado a su cuerpo, junto a un teléfono móvil y varias baterías.
Luego el hombre desconecta los cables conectados al artefacto y retira el dispositivo, mientras repite al niño que se mantenga tranquilo.
Más de 600.000 civiles aún permanecen aún atrapados en el sector occidental de Mosul, donde se libra una intensa batalla entre el Ejército iraquí y el Estado Islámico.
Desde que inició la operación para liberar esta ciudad se utiliza a los civiles como escudo humano y por ello más de 255 mil personas han sido desplazadas y unos 750 civiles han fallecido o han resultado heridos durante los ataques.