Noticias de Yucatán
Mariana Joselín Baltierra Valenzuela, de 18 años, decía
que quería ser veterinaria. Veía siempre por los demás. No le gustaban las
injusticias, y hoy su familia busca que su caso no quede impune. En julio, el
cuerpo de la joven fue localizado con signos de violencia extrema al interior
de una carnicería en Ecatepec, Estado de México.
A cinco meses de distancia del crimen, el presunto
asesino, identificado como Juan de la Cruz Quintero Martínez, sigue
prófugo de la justicia, y el círculo cercano de Valenzuela espera respuestas,
justicia.
“Mi hija, si bien tenía 18 años, no los aparentaba. Ella
parecía una niña de 13 o 14 años. Era muy chiquita, medía 1.45 [metros] y era
muy delgadita. Ella fue prematura, tuvo muchos problemas de salud, también por
eso la protegíamos mucho. A los 6 años le diagnosticaron epilepsia, pero
ya estaba controlada. Ella llevaba una vida normal. Le gustaba mucho
bailar. Era muy buena, nunca fue rebelde. Era incapaz de tener un mal
sentimiento hacia alguien. Era muy tierna. Era muy ingenua en cuanto a la
maldad del mundo. Su familia era lo más importante. Toda la gente que la
conoció la quería mucho”, describe Saira Valenzuela, la madre de Joselín, en
entrevista con SinEmbargo.
La mañana del martes 18 de julio, Mariana salió a pasear
a su mascota. Todo en orden, volvió a reunirse con su mamá, hermano y prima en
el Fraccionamiento Las Américas, en Ecatepec de Morelos. Sin embargo, cerca de
las 09:30 horas, se dirigió rumbo a la tienda y ya no regresó.
Saira Valenzuela se dio cuenta que “algo andaba mal”, el
establecimiento está a unos pasos de su hogar, no había razón alguna para que
la joven se tardara.
La mujer abandonó su domicilio con su sobrina en brazos,
tuvo “una sensación fea, como un presentimiento”. Caminó hasta el
final de la calle privada en la que viven, volteó a ambos lados y no tuvo
contacto visual con Joselín. Se angustió, pero trató de guardar la calma,
primero tenía que acercarse a la tienda para estar segura de que algo fuera de
lo normal había ocurrido.
–“Sí, vino Marianita hace ratito, compró huevo, compró
jamón”– le dijeron en el lugar.
Saira se dirigió a los locales que se encuentran
frente a la carnicería Carnicasa -la escena del crimen-, y realizó un sondeo desesperado.
Nadie vio nada, nadie escuchó nada.
El rostro de Mariana Joselín cubrió, de inmediato, la
colonia. Una fotografía, incluso, fue colocada en la entrada del negocio en el
que sería localizada sin vida casi 24 horas después de su desaparición.
Durante las siguientes horas, vecinas ayudaron a pegar
carteles con la imagen de la joven de 18 años. Se levantó un acta ante Odisea,
se solicitó el acceso a las cámaras del C-4, iniciaron las averiguaciones, los
rondines de las autoridades, sin embargo, cayó la noche y no hubo respuestas.
“Todo lo que quería yo era que mi hija regresara, pero
eso no sucedió. Pasé la noche en vela, amaneció y nuevamente salí a buscar”,
relató Saira.
Por la mañana del 19 de julio, una patrulla aparcó frente
al establecimiento de Carnicasa. Y ahí, en la esquina de la avenida
Independencia y José María Morelos y Pavón, una oficial de búsqueda se
aproximó a los padres de Mariana y les informó que había una joven sin vida que
respondía a las características de su hija. Poco antes del medio día, la
familia pudo confirmar que Joselín había sido asesinada.
Después tocó el turno a los trámites, la denuncia, las
declaraciones. En ese proceso el dueño de la carnicería reveló Juan de la Cruz
Quintero Martínez, su empleado, tenía entre 15 y 20 días rentando un cuarto
junto a las accesorias.
“Por eso se llega a la conclusión de que él es el
presunto culpable. Él vivía ahí, era el único que tenía acceso (aparte del
dueño de la carnicería) y no aparecía. Dejó ahí el arma homicida, dejó la ropa
ensangrentada”, detalló la madre.
EL PRÓFUGO Y LA RECOMPENSA
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México
(FGJEM) actualmente ofrece una recompensa de hasta medio millón de pesos a la
persona que aporte información útil, veraz y oportuna para la localización y
aprehensión de Quintero Martínez, alias El Güero.
SinEmbargo consultó directamente a la Fiscalía
mexiquense para conocer su versión del caso, pero la dependencia no dio
respuesta a las solicitudes.
El hombre, de 28 años de edad, es el principal sospechoso
de abusar sexualmente de Mariana Joselín y apuñalarla en múltiples ocasiones.
“Ya no nos han dado ningún avance de la investigación. No
sabemos nada, si ya salió del país, si siguen investigando o no”, reclamó la
mamá de Mariana, quien aseguró que en la última cita que tuvo su familia con
las autoridades les dijeron que lo que quedaba era esperar a que el criminal
cometiera un error.
De acuerdo con la familia, la Fiscalía de la entidad
gobernada por Alfredo Del Mazo Maza aseguró que solicitaría una ficha roja a la
Interpol. Sin embargo, y hasta la tarde del 7 de diciembre del 2017, el nombre
de Quintero no aparecía en la lista de personas buscadas.
La entidad acumula mil 655 denuncias por violación tan
solo este año y mil 684 homicidios dolosos.