Un Juez
condenó a 51 años y tres meses de cárcel, a René "N" y Gehú
"N", por el delito de feminicidio en agravio de Sandra Luz Díaz
Morales, a la que enterraron viva el 29 de agosto del 2014, en una casa de
seguridad de Tuxtla Gutiérrez, debido a que días antes la víctima había pedido
el divorcio a su cónyuge.
René
"N" y Gehú "N", esposo y cuñado de la víctima, enterraron
viva a Sandra Luz, en complicidad de cuatro hombres y una mujer, en una casa de
seguridad ubicada en la colonia Terán, de Tuxtla Gutiérrez, dio a conocer la
Fiscalía General de Chiapas.
Los cuatro
hombres y la mujer, ya fueron sentenciados a 51 años de prisión, el pasado 11
de abril.
A
principios del 2014, Sandra Luz le pidió el divorcio su esposo, pero este se
opuso porque "no quería compartir los bienes que poseían", por lo que
decidió planear el secuestro con la complicidad de su hermano Gehú y otras
cincos personas más.
Gehú fue el
encargado de contratar a Concepción "N", José Luis "N",
Dulce María "N", Johan Mauricio "N" y Edgar Alberto "N",
para concretar el secuestro.
Ese 28 de
agosto del 2014, a las 09.20 horas, Sandra Luz salió de su hogar, en el
fraccionamiento Los Laureles, a bordo de su camioneta Jeep Grand Cherokee, para
ir a trabajar a su negocio ubicado en el centro de Tuxtla Gutiérrez.
Pero
minutos después y antes de que Sandra Luz llegara a la negociación, los
plagiarios simularon un accidente de tránsito, para luego raptar a la esposa de
René, a la que subieron en un vehículo Dodge tipo Stratus.
Mantuvieron
a Sandra cautiva en una casa de seguridad en la colonia Teherán, que es
propiedad de Gehú, dijo la dependencia.
Horas
después de haber llegado, René ordenó a sus cómplices que asesinaran a su
esposa, por lo que la ataron de manos y cubrieron con un lienzo los ojos y
procedieron a enterrarla viva en una fosa que habían cavado en el patio de la
vivienda.
Después de
que Sandra Luz quedó bajo la tierra, los cómplices procedieron a cubrir la
cavidad con cemento, lo que le provocó la muerte por asfixia mecánica.
A siete imputados que se encuentran recluidos en el penal de El Amate, se les determinó un pago por la reparación del daño, por 322 mil 676 pesos.
SUN.