El cardenal
Sergio Obeso Rivera, arzobispo emérito de Xalapa, murió este domingo a los 87
años de edad, en su casa de Coatepec, Veracruz, tras 48 años de ministerio Episcopal
y 65 en el Sacerdotal.
La Arquidiócesis
de Xalapa informó que el tres veces presidente de la Conferencia del Episcopado
Mexicano (CEM), promotor de San Rafael Guízar y Valencia, y reconocido artífice
de la reforma que regula las relaciones Iglesia-Estado, será velado en la
catedral local, desde las primeras horas de este lunes.
Su misa
exequial se realizará este martes, a las 12:00 horas y será sepultado en la
Catedral de Xalapa.
El cardenal
Obeso Rivera se encontraba bajo tratamiento y observación médica en su casa de
Coatepec, Veracruz, y presentaba malestares "propios de su edad",
confirmó la Arquidiócesis.
Sergio
Obeso Rivera nació en Xalapa, el 31 de octubre de 1931. Fue ordenado obispo en
1971 y elegido cardenal por el Papa Francisco en 2018.
Por su
parte, en un comunicado, la CEM reconoció la labor de Ortega Rivera.
"Reconocemos
su entrega generosa a la Iglesia que peregrina en nuestro país, especialmente
la gran labor de coordinación y responsabilidad principal que desempeño como
Presidente de nuestra Conferencia Episcopal durante tres periodos", dijo.
Y agregó:
"Sobre todo, en algunos episodios significativos de la historia de nuestro
País, participando en las negociaciones de paz y reconciliación de los Acuerdos
de San Andrés, en los esfuerzos de restablecimiento de las relaciones entre el
Estado Mexicano y la Santa Sede, al promover la ley reglamentaria del artículo
130 Constitucional".
El escrito apuntó, además, que "en otros trienios fue responsable de los servicios de las Comisiones de Pastoral Social y del Clero, así como gran impulsor del proceso de canonización de San Rafael Guízar y Valencia".
Notimex.