En junio próximo vence el plazo para que los diferentes
establecimientos dejen atrás los popotes y bolsas de plásticos como parte de un
tema prohibitorio del gobierno estatal y de protección al ambiente; sin
embargo, no todas dejarán de expedirse, dijo titular de la Cámara Nacional de
la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), Alejandra
Pacheco Montero.
Muchas preguntas se generaron con la iniciativa, incluso
algunas tiendas departamentales promovieron el uso de bolsas de tela para
transportar los productos.
“He visto cierta confusión en el no uso de bolsas de
plásticos, muchas veces se requiere en el caso de los giros gastronómicos el
tema de la inocuidad de los alimentos, si se permiten las bolsas, siempre y
cuando tenga un 30% de material reciclable. Eso hay que considerar”, señaló.
Aclaró que en el sector restaurantero se podrán usar bolsas,
siempre y cuando cuenten cumplan con esta disposición.
Cabe recordar que en junio pasado el Congreso del Estado aprobó la iniciativa
para disminuir y posteriormente eliminar el uso de bolsas y popotes de
plástico, así como contenedores de unicel.
La propuesta expone que, en un período de dos años, se
sustituyan las bolsas de transportación y popotes de plástico desechables, y
también contenedores de unicel, por opciones que cuiden del medio ambiente,
como aquellos compuestos por insumos biodegradables.
Mientras esto ocurre, desde su aprobación, se contará con
seis meses para migrar a bolsas y popotes de un solo uso hechos con materiales
biodegradables; los supermercados contarán con un plazo de 12 meses y las
empresas dedicadas a la venta en mayoreo y menudeo lo hagan en un periodo de 18
meses.
Una vez que concluyan estos períodos, todos los
establecimientos que hagan uso de popotes y bolsas de plástico y contenedores
de unicel, ya deben haber migrado a utensilios que estén fabricados con materiales
de rápida degradación para proteger el medio ambiente.
Fuente: Peninsular Punto Medio.
