El video que se ha hecho viral en esta cuarentena, en donde se observa el ritual de un grupo de africanos cargando un ataúd y bailando música electrónica, tiene un trasfondo cultural tan fuerte en Ghana, que se ha vuelto una tradición.
El guión del video es sencillo: Se graba a alguien haciendo algo y justo cuando la situación se sale de control y aparecen imágenes de algún accidente gracioso, una acción muy arriesgada o hasta una declaración polémica.
Enseguida se corta el video e inicia el de los ghaneses con el ataúd y de fondo una canción de música electrónica.
Sin embargo, el grupo que realiza estas demostraciones en los funerales es un grupo muy organizado en Ghana liderado por Benjamin Aidoo, pionero en esta forma de celebración.
En una entrevista transmitida en el programa Que Thi Jugues de RAC1, explicó que su performance se ha vuelto tan tradicional que la gente lo contrata para los funerales. Las modalidades son tres: la caminata usual, tranquila y parsimoniosa un poco de música más alegre y el show completo, dependiendo de los deseos de los deudos.
"Mi opinión es que debemos celebrar la muerte. Cuando una persona nos deja tenemos que recordar lo que ha hecho en su vida. Tú sabes lo que esta persona ha aportado, sabes lo que hecho por ti. De alguna forma tienes que agradecerle que en parte eres como eres gracias a esa persona", comentó en el programa.
"Bailamos porque queremos que la gente se de cuenta de que no tenemos que llorar con la muerte, debemos sentirnos felices por esa persona", dijo el hombre.
Aidoo también promueve que sus compañeros de acto, tengan trajes especiales y no el clásico traje negro propio de los funerales.
En un reportaje hecho por una viajera llamada Opie Russell, que viajó a Ghana para el funeral de su suegra, también se explica que las familias llegan a gastar mucho dinero, más que en una boda, y hasta se endeudan para poder realizar funerales tradicionales.
"La familia prepara durante días comida típica. Es su responsabilidad alimentar a cada uno de los asistentes a la celebración", la más importante de sus vidas. "Miles de cedis, moneda ghanesa, pueden gastarse en comida, bebida, sillas, DJ, posters, camisetas...", explica Russell.
A veces, incluso contratan camarógrafos para que luego puedan ver el video del entierro varias veces.
La muerte, con los distintos significados que tiene en cada cultura, para los ghaneses puede ser un espacio de celebración de la vida.
El Siglo de Torreón