La defensa legal de Yuridia “N”, la migrante mexicana que fue sometida a una intervención quirúrgica sin su consentimiento en el Centro de Detención de Irwin, Georgia, que depende del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) en Estados Unidos, tiene como objetivos principales obtener el tratamiento médico y psicológico de las autoridades responsables, resolver su situación migratoria, pese a que ya se encuentra en México, y lograr, a través de que se conozca su caso y el de muchas más, que no se repitan este tipo de situaciones en prisiones migratorias.
Por lo pronto, su abogada defensora, Kathleen Hoyos, integrante del despacho Antonini & Cohen Immigration Law, informó que esta semana concluirán una queja ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos por “violaciones internacionales de derechos humanos” y contra autoridades mexicanas por posibles omisiones médicas luego de su deportación en septiembre pasado.
"Son muchos objetivos, pero el objetivo primordial en estos momentos es obtener el tratamiento tanto psicológico como médico que necesita para recuperarse del trauma que ha sufrido y de forma secundaria, el corregir los errores que hayan sucedido con su caso migratorio, y ya están ella acá (EEUU) reunida con nosotros y hablaremos que otras opciones podría existir”
En conferencia de prensa junto con integrantes de despachos de defensa de migrantes como Project South y Owings MacNorlin, la abogada Hoyos señaló que siguen a la búsqueda de otros casos de mujeres que pudieran sumarse a las al menos 17 que han denunciado prácticas médicas ilegales y malas condiciones, especialmente en esta prisión operada por LaSalle Corrections, bajo la jurisdicción de ICE.
“Lo que estamos buscando aquí nosotras es tratar de identificar otras personas, porque en lo personal ella siente que tiene un deber no solamente por contar su historia sino por tratar de que se corrija esto a cualquier otra mujer que le haya sucedido”, puntualizó.
Luego de que se destapara este caso de histerectomías practicadas a mujeres migrantes por el médico Mahendra Amin, la cancillería mexicana informó que de 24 mujeres que fueron entrevistadas por personal consular en este centro de detención o ya en México, solo dos refirieron haber sido sometidas a una operación sin consentimiento, aunque en ninguno de los casos se trató de una extirpación del útero.
Según el relato, Yuridia de 26 años fue sometida en Irwin a una operación por este doctor que le extirpó dos quistes de un ovario, sin que fuera necesario clínicamente y, sobre todo, sin su consentimiento.
En la conferencia virtual, Azadeh Shahshahani, Directora Legal de Project South dijo que las condiciones de atención irregular en este centro de detención no son de ahora, datan de hace varios meses y así se han reportado a las autoridades responsables que han hecho caso omiso a estas denuncias.
“Abusos sexuales, condiciones de tratamiento médico inadecuadas, falta de cuidado prenatal para las mujeres en embarazo, falta de agua limpia para beber y abuso de aislamiento en el centro detención. Además, de falta de exámenes de Covid-19 aún y cuando las personas son sintomáticas”, refirió.
Las defensoras de migrantes anticiparon que para estos casos particulares cuentan con el respaldo de congresistas norteamericanos, pero ahora buscarán el respaldo de Naciones Unidas y de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para lograr sancionar a los responsables
“El centro de detención de Irwin debería ser cerrado inmediatamente y la gente debería ser liberada. El Gobierno de Estados Unidos y la organización privada que administra este centro de detención deberían ser sujetos responsables por sus acciones”, afirmó la abogada Shahshahani
