La diputada federal Lorena Villavicencio (Morena) aseveró que eliminar los fideicomisos no incrementará la capacidad financiera del Estado, pero extinguirlos podría generar costos inciertos por el incumplimiento de las obligaciones legales contraídas con los organismos.
La morenista, quien adelantó que votará en contra del dictamen que mañana se someterá a discusión y votación, puntualizó que el dinero de los fideicomisos no sólo proviene del erario, de modo que al cancelarlos, el Gobierno mexicano clausuraría una fuente adicional de financiamiento para cumplir con sus cometidos.
Villavicencio fijó su postura a través de un texto enviado a los medios de comunicación, pues indicó no podrá presentar mañana una posición en lo general sobre el dictamen, aunque no aclaró la razón.
“Mi voto es en contra, aun cuando sé que la pandemia del Coviod-19 nos coloca en dificultades para contar con recursos suficientes, pero estos no deben obtenerse de fideicomisos importantes para el desarrollo educativo; científico y tecnológico; cultural (FIDECINE), así como para garantizar la protección a defensores de derechos humanos y periodistas, y menos para prevenir y mitigar desastres naturales o en materia de salud”, expresó.
Consideró que no todos los fideicomisos públicos implican gastos innecesarios, ni se ha acreditado que sus recursos fueron utilizados de forma discrecional o que no han cumplido con sus propósitos.
“No comparto que se haya ampliado el número de fideicomisos de 44 a 109, y caracterizarlos como instrumentos opacos, cuando fueron concebidos para auxiliar al Gobierno en la administración de fondos públicos bajo principios de legalidad, eficiencia, economía, trasparencia y honradez, así como impulsar áreas de desarrollo estratégicas y prioritarias para el país.
“Me parece que sólo deben desaparecer los que no cumplen con sus objetivos o aquellos donde esté plenamente acreditada la desviación de recursos, ante lo cual se debe proceder a la denuncia ante la autoridad competente”, expuso la diputada.
Agregó que los recursos que originan un fideicomiso pueden provenir del presupuesto público, pero los hay mixtos que reciben aportaciones de particulares, auto generados o recursos de instituciones internacionales.
Y en todos ellos, abundo, están obligados a cumplir con las disposiciones de la Ley de Presupuesto, Contabilidad y Gasto Público Federal, y de la propia Constitución.
“La eliminación de esos fideicomisos no favorece por sí misma, a la rendición de cuentas. A diferencia de los recursos fiscales, la existencia de estos instrumentos permite saber si efectivamente cumplen con el mandato para el que fueron creados”, mencionó.
