El INAH desmintió la supuesta historia de amor y de promesas con que la turista tijuanense que subió a la pirámide de Kukulcán en Chichén Itzá.
Aunque en una primera versión se dijo que la mujer aseguró que quería cumplir la promesa a su esposo fallecido, de esparcir sus cenizas en el monumento, la institución señaló que "en ningún momento aventó cenizas o algún otro objeto”.
En un comunicado dado a conocer la noche del lunes, la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del INAH, aseguró que de forma inmediata, “el personal de seguridad de la zona arqueológica, de forma pacífica, exhortó a dicha persona a bajar de la estructura prehispánica y, una vez abajo, fue puesta a disposición de la policía municipal”.
Asimismo, el abogado José Arturo Chab Cárdenas, jefe del departamento jurídico del Centro INAH, informó que la mujer llegó a las últimas escalinatas de la pirámide. Sin embargo, no logró entrar en el trono del templo de Kukulcán (estructura como también se conoce al Castillo) ni esparció desde esa altura las cenizas de su difunto esposo, como se rumora en las redes sociales.
“Ya hablamos con ella y nos dice que no es verdad que haya subido para tirar las cenizas de su esposo”, señaló el funcionario del INAH. “Llegó a las últimas escaleras, más no logró entrar al trono.”
“No es común que la gente suba a la pirámide. No se puede subir al monumento. Está rodeado de alambres, pero ella brincó la cerca y subió. Ya hablamos con ella y con el touroperador. Se les citó para recalcar que pusieron en riesgo el patrimonio histórico de Yucatán”.
En uno de los vídeos que publicó en Facebook una testigo se ve cómo la mujer sube en forma rápida y luego desciende por sí sola.
Cuando estuvo al pie de la imponente pirámide de 24 metros de altura, la gente le recriminó su osadía y pidió cárcel para ella.
La respuesta del INAH
Sobre esos hechos, el INAH difundió un comunicado en el que informa lo siguiente: “El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) inició un expediente administrativo por el acceso no autorizado al monumento arqueológico denominado El Castillo en la Zona Arqueológica de Chichén Itzá, el día domingo 3 de enero de 2021”.
El INAH informa que a las 13:40 horas de ese día se activaron los protocolos de seguridad en la Zona Arqueológica de Chichén Itzá en Yucatán, por el reporte que señalaba que una persona del sexo femenino pretendió acceder sin autorización a la pirámide denominada El Castillo por una de sus escaleras laterales.
Las primeras indagatorias señalan que la persona de sexo femenino es originaria de Tijuana, Baja California y llegó a Chichén Itzá por medio de una agencia turística. Los agentes del orden informaron al INAH que en el momento de los hechos, la fémina se encontraba con sus capacidades disminuidas por efectos embriagadores.
Por su parte, el abogado José Arturo Chab Cárdenas, jefe del Jurídico del INAH en Yucatán, señaló “que desde el día de domingo se abrió el expediente administrativo No. CINAH/YUC/JUR/01-2021 por los hechos que constituyen una infracción a la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos, por lo ya fueron citados para que comparezcan al jurídico del INAH los probables responsables”.
Otras violaciones a las restricciones
Desde el 2008, el INAH prohibió subir a los templos y castillos principales de las zonas arqueológicas. En 2006, la cantante Thalía fue multada por fotografiarse sin permiso en espacios restringidos de esa misma zona arqueológica, entre ellos el Chac Mool, la cabeza de Kukulkán y el Cenote sagrado.
En 2017, el INAH calificó de ilegal una fotografía de Chichén Itzá tomada por un dron. Después del suceso del pasado domingo, el Instituto exhortó a conducirse con respeto al patrimonio y a acatar las medidas de seguridad.
#ladykukulkan pic.twitter.com/7ei6zOWsKj
— SC (@Lizhueertas) January 4, 2021