Para cualquier
pareja, el hecho de esperar un bebé es un acontecimiento que marca sus vidas y
esperan con gran emoción. En cambio, para Hakan Aysal sólo
significaba poder obtener beneficios, aunque eso significara atentar contra la
vida de su propia esposa.
Hakan, un hombre de 40 años y originario de Turquía, elaboró un siniestro plan para asesinar a su cónyuge, Semra Aysa (de 32 años y que se encontraba en el séptimo mes de la gestación), sólo para poder cobrar una póliza de 40 mil euros (aproximadammente 975 mil pesos mexicanos).
El hombre fingió
que irían de vacaciones al Valle de las Mariposas, uno de los mayores
atractivos naturales de la provincia de Mugla, en Turquía. Dicho sitio es
una paradísiaca bahía en medio de formaciones rocosas; aparte de contar con un
importante desarrollo turístico.
Ya en el lugar,
Hakan le pidió a Semra que se tomarán una selfie del recuerdo desde
uno de los miradores, donde se pueden apreciar las montañas y la playa. En
determinado momento, y cuando ningún visitante o lugareño estaba, empujó a
su esposa al vacío.
El barranco tenía
una caída de 300 metros, por lo que Semra y el bebé que esperaba
fallecieron de forma instantánea en la caída. En aquel momento, Hakan
alegó que había sido un accidente.
Aunque este hecho
ocurrió en junio de 2018, las autoridades turcas apenas detuvieron a
Hakan y lo juzgaron por homicidio doloso. Fue Naim Yolcu, hermano de
la víctima, quien aseguró que su cuñado tenía un comportamiento extraño, ni
siquiera estaba triste por perder a su esposa e hijo.
Luego hubo
inconsistencias en el testimonio de Hakan, pues aseguró que Semra había querido
subir al acantilado porque el gustaban los deportes extremos. Naim
argumentó que su hermana le temía a las alturas. Todo desembocó en una
investigación donde se descubrió que su propio marido la había asesinado para
cobrar el seguro.