El primer caso de una recién nacida con inmunidad al covid-19 luego de que a la madre se le aplicara la vacuna Moderna, fabricada con ARN mensajero, a las 36 semanas con tres días de gestación, de acuerdo con la versión preliminar de un artículo publicado por medRxiv. Al momento del parto se detectaron anticuerpos IgG (inmunoglobulina G)contra el SARS-CoV-2 en la sangre del cordón umbilical.
En el documento titulado Newborn Antibodies to SARS-CoV-2 detected in cord blood after maternal vaccination (Anticuerpos contra el SARS-CoV-2 en recién nacidos detectados en la sangre del cordón umbilical después de la vacunación materna) se especificó que el parto vaginal espontáneo fue normal a las 3 semanas de aplicar la primera dosis a la mamá. La trabajadora de salud de primera línea dio a luz a una niña vigorosa y saludable con una evaluación subsiguiente del niño sano.
“Se tomó una muestra de sangre del cordón inmediatamente después del nacimiento y antes del parto de la placenta con 0.5 ml extraídos en un tubo de tapón rojo para el suero. El suero se envió para la prueba de anticuerpos contra el SARS-CoV-2 a la proteína Spike", según lo realizado por Labcorp en Estados Unidos. Luego, "la madre que ha estado amamantando exclusivamente, recibió la segunda dosis de la vacuna de Moderna Inc. durante el período posparto según lo normal. Cronograma del protocolo de vacunación de 28 días.”, detalla el texto.
El resultado fue la detección de anticuerpos de sangre inmunoglobulina G a un nivel de 1.31 unidades por mililitro. “Este inmunoensayo de electroquimioluminiscencia (ECLIA) utiliza una proteína recombinante que representa el RBD (dominio de unión al receptor) del antígeno S para la determinación cuantitativa de anticuerpos contra el SARS-CoV-21.”
Las nuevas vacunas de ARN mensajero en teoría demostrarán una seguridad similar a la de la influenza en esta población, resaltan los investigadores, incluido el paso placentario de anticuerpos protectores. Sin embargo, la infección natural por SARS-CoV-2 parece conferir un paso de anticuerpos al feto más bajo de lo esperado, lo que puede indicar que los recién nacidos de madres vacunadas seguirán estando en riesgo de infección.
“Hemos demostrado que los anticuerpos de inmunoglobulina G del SARS-CoV-2 son detectables en la muestra de sangre del cordón umbilical de un recién nacido después de una sola dosis de la vacuna Moderna COVID-19. Por lo tanto, existe la posibilidad de protección y reducción del riesgo de infección del SARS-CoV-2 con la vacunación materna”, se detalla en el archivo.
La cuantificación de la respuesta de anticuerpos, añaden los autores Paul Gilbert y Chad Rudnick, puede ayudar a determinar el título de anticuerpos específicos y ayudar en el seguimiento longitudinal de la dinámica dé la respuesta de los mismos en pacientes individuales. Se desconoce la eficacia protectora en los recién nacidos y el momento ideal de la vacunación materna.
Los expertos refieren como antecedente que la vacunación materna contra la influenza y la TDaP (que protege contra el tétano, la difteria y tosferina) han sido bien estudiadas y recomendadas en términos de seguridad y eficacia para la protección del recién nacido mediante el paso de anticuerpos por la placenta.
Se esperaría, afirmaron, una protección similar del recién nacido después de la vacunación materna contra el SARS-CoV-2; sin embargo, con este artículo, resaltan la necesidad urgente de realizar investigaciones sobre su seguridad y eficacia en mujeres embarazadas y madres lactantes, así como su descendencia.
Los autores detallan que “se necesitarán más estudios para cuantificar la cantidad de anticuerpos neutralizantes virales presentes en bebés nacidos de madres sin experiencia con el SARS-CoV-2 que se vacunaron antes del parto".
"Adicionalmente, la duración de la protección de anticuerpos en esta población aún no se conoce y se pueden usar mediciones seriadas de anticuerpos totales para determinar cuánto tiempo se espera la protección, lo que puede ayudar a determinar cuándo sería el mejor momento para comenzar la vacunación en los recién nacidos de madres que recibieron una vacuna para el SARS-CoV-2”, finalizaron.