Tras dos años de pandemia, convivir con un virus se ha vuelto algo habitual para los humanos, pero ahora las víctimas son los perritos quienes tienen cuadros de vómito y diarrea, lo que por supuesto ha preocupado a sus dueños.
Todo comenzó en el condado de Yorkshire, Reino Unido, donde ha habido un brote de contagios entre los animalitos que suelen salir a jugar.
La veterinaria, Alexandra Proud, ya había realizado una advertencia acerca de la existencia de este virus pero son los recientes contagios los que han preocupado a la población.
«Si se trata de un virus o una bacteria, se propaga a través de la orina, las heces o la muda de pelo. Y todos sabemos cómo les gusta a los perros encontrarse y saludarse: nariz con nariz, tocarse las nalgas y todo tipo de cosas», dijo Proud a La Vanguardia.
Los contagios se han dado entre los peludos citadinos, lo que ha dejado de lado la creencia que se trataba de un contagios producido en las playas. El Departamento de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales DEFRA también separó al virus del mar pues afirmó que “no tiene conocimiento de ningún vínculo con el problema de los cangrejos y langostas muertos arrastrados a tierra en las costas de Yorkshire a finales del año pasado”.
