Julio César Chávez es uno de los grandes referentes del boxeo mexicano gracias a sus múltiples campeonatos mundiales; logros alejados de lo conseguido por sus dos hijos que decidieron seguir los pasos de su papá todavía son el mismo éxito en los cuadriláteros.
La relación entre Julio César Chávez y sus hijos no siempre es la mejor, ya que en varias ocasiones la familia Chávez quedó mermada por las declaraciones polémicas que ambos bandos se lanzan con respecto a problemas personales como el supuesto uso de sustancias prohibidas que impera en la dinastía del boxeo mexicano.
La leyenda del boxeo mexicano habló sobre lo qué piensa de Julio César Chávez Jr y de Omar Chávez, los cuales desde hace unos años dejaron de estar en las funciones estelares por su paso irregular en el ring. Si bien el junior fue campeón del mundo en peso mediano por el Consejo Mundial de Boxeo, no pudo concretar su defensa ante Sergio 'Maravilla' Martínez, el argentino que le colocó la primera derrota de muchas en su trayectoria como profesional.
"La ilusión de ellos siempre era llegar a ser como su padre, yo les di la oportunidad, pero desafortunadamente han sido muchos corajes. No me ha dado un infarto porque Dios es grande. Mi coraje es que sean muy irresponsables", indicó el gran campeón mexicano durante una charla pública con Eugenio Lamazón.
Durante los noventa, Julio César Chávez coleccionó campeonatos y se retiró del boxeo con un récord inigualable de 107 victorias con apenas seis derrotas, la mayoría dentro de su declive como deportista. Caso contrario con el Junior que ya tiene seis derrotas con 56 triunfos, sólo que ante peleadores de bajo perfil.
"Desde que tengo uso de razón les he puesto los guantes a Julio y Omar, lógicamente yo no quería que ellos fueran boxeadores, pero pues ellos me lo fueron pidiendo de una forma que no podía negarme, porque siempre me vieron pelear", reconoció el campeón en tres divisiones.
Desde su perspectiva como padre, JC Chávez asegura que al principio todo parecía una ilusión, pero las derrotas de sus hijos por culpa de la indisciplina sólo le dieron decepciones. La familia Chávez no está unida desde hace varios años, aunque en los últimos días aparecieron todos reunidos en una comida en un restaurante en una clara muestra de que se quieren limar las asperezas.
"Al principio fueron alegrías porque era jóvenes con muchas ilusiones, pero eso se fue desvaneciendo con el tiempo. La verdad ha sido difícil", finalizó Julio César Chávez.