¿Qué haces con las cáscaras de mango una vez que disfrutaste de su deliciosa pulpa? Actualmente, estamos en el pico de la temporada de este delicioso fruto, siendo el momento en el que se obtiene casi toda su producción en nuestro país, y es el alimento perfecto para refrescarnos en verano, sin embargo, es muy común que de este solo se aproveche su pulpa, mientras que la cáscara es simplemente tirada a la basura como un desecho sin saber todo lo que puedes hacer con ellas.
Para comenzar, debes saber que esta parte del fruto también es comestible y puedes emplearlas para realizar múltiples preparaciones, las cuales, además de resaltar por su delicioso sabor, tienen un gran valor nutritivo, siendo fuente de fibra, proteína, vitamina C y antioxidantes que son beneficiosos para la salud. Así que, para que no sea opción solo tirar esta parte del mango a la basura, el día de hoy te compartiremos tres deliciosas y sencillas recetas que puedes hacer con ellas.
Snack de cáscara de mango
Una de las formas más sencillas de aprovechar la cáscara de mango es utilizándolas para hacer un delicioso snack que puedes disfrutar entre las comidas, quedarán como unas chips crujientes que puedes acompañar con un poco de picante de tu elección, para prepararlas, solo debes hacer lo siguiente:
Antes de pelar el mango, asegúrate de lavar la cáscara perfectamente para después cortarlas en trozos pequeños.
Opcionalmente, puedes tomar los trozos de cáscara de mango y pasarlos por una cama de chile en polvo.
Una vez que estén listas, lleva los trozos de cáscara de mango al horno a 70°C hasta que estén crujientes.
Bizcocho de cáscara de mango
Aunque a muchos les podría parecer extraño, la cáscara de mango también puede aprovecharse para hacer un bizcocho de una manera sencilla y rápida, para ello, sigue estos pasos:
En una licuadora, agrega la cáscara de dos mangos grandes que se encuentren perfectamente limpias, asimismo, añade 3 huevos, una taza de azúcar, 3 cucharadas de mantequilla y media taza de agua para después licuar hasta que quede perfectamente homogéneo.
Retira la mezcla de la licuadora y colócala en un recipiente grande para añadir poco a poco una taza y media de harina de trigo y una cucharada de polvo para hornear; mezcla perfectamente con un batidor de globo o una cuchara hasta que obtengas una mezcla homogénea.
Vierte esta mezcla en un molde para hornear al que le hayas untado mantequilla para desmoldar y lleva al horno precalentado a 180°C por 40 minutos.
Desmolda y disfruta.
Mermelada de cáscara de mango
Otra opción altamente útil para aprovechar las cáscaras de mango es realizando una mermelada, para ello, sigue estos pasos:
Toma la cáscara de 5 mangos medianos y maduros, junto con 250 gramos de azúcar, una taza de agua y una cucharada de clavo.
Licua estos ingredientes hasta que quede una mezcla homogénea, para después llevarla a una cacerola u olla con fuego medio e incorporar todo el tiempo hasta que alcance una consistencia típica de una mermelada.
Guarda en un recipiente y disfruta.
