La ministra presidenta de la Suprema Corte, Norma Lucía Piña, rechazó cualquier influencia interna o externa que afecte el trabajo de jueces del país.
Advirtió que “no cederemos ni un milímetro en lo avanzado por nuestra democracia constitucional a favor de la independencia judicial”.
La también presidenta del Consejo de la Judicatura Federal dijo que la justicia representa el valor más alto de lo que la sociedad puede anhelar.
Piña dijo que corresponde a juzgadores impartir justicia con “honradez, con plena convicción, con excelencia, con la mayor firmeza y con absoluta lealtad a nuestra Constitución”.
Aseguró que a las y los juzgadores nada los “detendrá en nuestra noble tarea como garantes del acceso de toda la sociedad a una justicia pronta, completa e imparcial”.
La declaración de Piña ocurre después de que el presidente Andrés Manuel López Obrador reveló que intervenía en asuntos judiciales con la intermediación de Arturo Zaldívar, mientras fue presidente de la Suprema Corte y que ahora trabaja en la campaña de Claudia Sheinbaum.
Días después, el mandatario mexicano negó intromisión en el Poder Judicial y aseguró que con Zaldívar hubo ‘colaboración‘ entre poderes.