En una escena que ha dejado a la comunidad de Prunedale, en el condado de Monterey, California, en estado de shock, Vicente Arroyo, de 39 años, ha sido acusado de matar a 81 animales, incluidos caballos miniatura, cabras y aves de corral. Este horrendo suceso, que ocurrió en el transcurso de tres horas, ha llevado a la presentación de múltiples cargos de crueldad animal y otras acusaciones en su contra.
El pasado lunes, Arroyo presuntamente utilizó varias armas para disparar contra los animales que se encontraban en corrales y jaulas en una pequeña parcela en Prunedale. Los animales pertenecían a diferentes propietarios, incluidos los arrendatarios del terreno. Entre las víctimas se cuentan 14 cabras, 9 pollos, 7 patos, 5 conejos, un cuyo, y un grupo de 33 periquitos y cacatúas. Además, dos caballos miniatura y un poni llamado Lucky también fueron masacrados.
El jefe de policía del condado de Monterey, Andrés Rosas, declaró que la escena era “bastante traumática” y que los dueños de los animales, comprensiblemente devastados, no desean hablar con los medios. "Estas eran las mascotas de estas personas. El dolor que sienten es indescriptible", comentó Rosas.
¿Qué llevó a Arroyo a cometer estos actos?
Hasta el momento, las autoridades no han podido identificar un motivo claro para los actos de Arroyo. Sin embargo, su abogado, William Pernik, ha sugerido que su cliente podría estar atravesando un grave trastorno mental. Durante la audiencia del jueves, Pernik argumentó que Arroyo no estaba en condiciones mentales adecuadas para enfrentar los procedimientos judiciales en su contra.