La histórica operación chilena de salvamento de 33 mineros culminó anoche, antes de las 8 -hora de México-, con la salida del jefe del grupo, Luis Urzúa, en un ambiente de fiesta y emociones a flor de piel.
El rescate, que comenzó el martes, fue seguido por millones de televidentes en el mundo y en medio de mensajes de aliento y de reconocimiento de presidentes como Barack Obama, Felipe Calderón y Luis Inácio Lula da Silva, quienes llamaron vía telefónica a su par chileno, Sebastián Piñera.
La sorpresa no sólo fue el salvamento de los 33 mineros, sino que todos están en buen estado de salud, pese a vivir 69 días bajo tierra y en condiciones precarias.
La salida de Urzúa fue celebrada con cornetas, gritos y aplausos del equipo de rescate y del campamento improvisado a las afueras de la mina.
"Espero que esto nunca más vuelva a ocurrir", dijo Urzúa al presidente al entregarle, de forma simbólica el "turno".
"Don Luis Urzúa: Recibo su turno y lo felicito porque salió último, como los buenos capitanes", respondió el presidente. Y luego todos entonaron el himno nacional con sus cascos sobre el pecho.
Anoche mismo empezaron a salir los 5 socorristas que quedaban en el socavón
