Un edil panista dice que los dueños de los negocios y los habitantes de la zona donde se hará el túnel creen que se verán muy afectados con la obra
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Sin haber concursado la obra del paso deprimido o túnel vial, éste ya provocó un malestar generalizado entre habitantes yusuarios, por lo que el próximo lunes el regidor panista Luis Canto García pedirá a la alcaldesa meridana Angélica Araujo Lara frene dicho proyecto .
El edil señaló que los vecinos del lugar, Paseo de Montejo con Circuito Colonias, le han externado su desacuerdo con ese proyecto, por considerar que les generará muchas molestias. Es el mismo sentir de los usuarios.
Ayer publicamos que hay opiniones divididas en torno a esta obra, algunos están a favor y otros en contra.
Canto García, quien coordina a los ediles panistas, señaló que la noche anterior acudió el director de Obras Públicas, Carlos Duarte Briceño, a informar a los vecinos sobre el proyecto.
Sin embargo, manifestó que el funcionario no convenció a los vecinos, aún con las explicaciones sobre los beneficios, "mejor dicho, no le creyeron".
El regidor reiteró que los usuarios de esa zona no creen que los trabajos fuesen a durar sólo cuatro meses, sino mucho más, con los perjuicios que eso conlleva.
El regidor aclaró que los mismos vecinos piden no politizar el asunto, que no se fuese a tomar como bandera de algún partido, y está de acuerdo.
Pero como representante popular será el portavoz de los ciudadanos y hará llegar a la autoridad sus señalamientos.
En la página 2 de esta misma sección publicamos una carta de los vecinos del lugar sobre la reunión que tuvieron anteanoche con Antonio Duarte Briceño, director de Obras Públicas de la Comuna, quien, dicen dio pocas respuestas a sus dudas.- D.D.M.
En contexto:El lunes se pedirá por escrito a la alcaldesa que frene el proyecto del túnel vial, que busque antes otras alternativas posibles
21 mayo 2011
Cartas al Diario
Partes medulares de una carta que enviaron las señoras Josefina Peón Mediz Bolio y Monserrat Alsina Masó
Ante la falta de tacto de las autoridades municipales que presentaron el proyecto del "paso deprimido" sin siquiera corrernos la más elemental cortesía de informar a los vecinos directamente afectados por esta magna obra, un grupo de residentes y empresarios de la zona nos dimos a la tarea de ejercer nuestro derecho de ser enterados en forma directa del destino de nuestros impuestos en una construcción que, de golpe y porrazo, cambiaría para siempre nuestro entorno inmediato, toda vez que los plazos contemplados en la legislación relativa al acceso a la información pública resultan demasiado largos ante la inminencia de los hechos.
Por ello, de manera libre pero determinada nos dimos a la tarea de organizar una reunión para que en un ánimo de diálogo los responsables de la citada obra nos expusieran sus razones para realizarla y de igual forma pudieran retroalimentarse con las inquietudes de los vecinos, todo con la finalidad de que cada quien tuviese los elementos suficientes para tener un criterio debidamente informado.
Nos extraña el tono parcial que se desprende del comunicado de prensa del Ayuntamiento de Mérida sobre el particular, publicado en la edición en línea del Diario de Yucatán. Por lo tanto nos vemos obligadas a realizar las siguientes aclaraciones:
1. La junta se llevó cabo siempre en un clima de tranquilidad, sin ningún tipo de agresión verbal o falta de respeto.
2. La exposición del Arq. Antonio Duarte Briceño, director de Obras Públicas de la Comuna, resultó para la mayoría de los presentes bastante general, cayendo incluso en trivialidades innecesarias.
3. Pocas fueron las respuestas puntuales a los cuestionamientos concretos de los asistentes.
4. Tal vez por la costumbre de tener auditorios "a modo" las autoridades confunden "tensión" con atención e "intransigencia" con independencia de criterio.
5. Las preocupaciones entre los vecinos se han multiplicado, por lo que serán necesarias, como señala el comunicado, reuniones posteriores.
Queda claro que aún quedan muchas preguntas sin respuestas. Hasta el momento la verdadera intransigencia ha estado del lado de un gobierno que no tiene la capacidad de entender a un puñado de hombres y mujeres que sólo intenta cumplir su deber ciudadano, por sus hijos pero también por nosotros mismos.