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El acusado y el quejoso reiteran su postura inicial
Como se esperaba, el careo entre un agente ministerial y un quejoso de falsificación de firma fue encendido: ambos reiteraron su postura.
El quejoso, Eduardo Vera Maldonado, dijo que el agente ministerial “conoce a mucha gente y eso aprovechó” para embargarle una casa.
“Aquí está su abogado, también él entró para que yo me desista, pero no acepté porque nunca falsifiqué firma alguna. Este señor, a quien conozco desde la infancia, me debe un dinero y me firmó un documento, por eso le seguí un juicio”, dijo el agente en un momento del careo llevado al cabo en el Juzgado 6o. Penal.
“¿Si no me debe, para qué quiere arreglos?”, añadió el agente ministerial, quien señaló que en el juicio civil Vera Maldonado también intentó el arreglo, pero no aceptó porque le ofrecían una cantidad menor. “No firme ningún documento, no firmé”, dijo el quejoso.”Si firmaste, frente a tu casa, en el capirote de un coche”, respondió el agente.Romero Hernández reiteró que el expediente se hizo a sus espaldas a pesar de que labora en la Fiscalía General, pues no le dieron oportunidad de defenderse. Luego, le aplicaron el “sabadazo”, ya que fue detenido el día 9 y el 11 pudo pagar una fianza.El careo es una de las diligencias ofrecidas para demostrar la inocencia de Romero Hernández, antes que se defina su situación jurídica.
El acusado y el quejoso reiteran su postura inicial
Publicada: Jueves, 14 de junio de 2012 3:00 am | Mérida
El acusado, José Luis Romero Hernández, se quejó de malos tratos de la Fiscalía General para la que labora y por varios días está incapacitado por una lesión en la columna vertebral.
Romero Hernández dijo que de manera “por demás influyente”, el quejoso se reunió “en el jurídico del penal” para intentar solucionar el conflicto.