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En su discurso en la sesión, Barrera Concha reiteró que el Ayuntamiento debe encabezar la ejecución de los planes y proyectos para rehabilitar el Paseo de Montejo.
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Después de la sesión, el gobernador se fue caminando a Palacio de Gobierno, aunque hizo una escala en la dulcería Colón para comprar un arrollado
Orador invitado a la sesión solemne de Cabildo por el aniversario 471 de la fundación de la ciudad, ellicenciado Jorge H. Álvarez Rendón destacó que “Mérida no es maya ni española, es una suma galante del ayer y del presente”.
“Mérida es aquél, es ese, es usted y es el que habla. Mérida somos nosotros. Diversos, pero hermanos en la misma cuna. Plurales, pero unificados en el amor a esta ciudad tierna y majestuosa. Mérida somos nosotros. Todos nosotros”, subrayó Álvarez Rendón, uno de los cronistas de la ciudad.
“Vamos a husmear en nosotros mismos. Seamos meridanos de amplia residencia, exploradores en nuestra propia casa.
Nueva petición por los planes en Paseo de Montejo
El primer edil encabezó ayer, con el gobernador Rolando Zapata Bello, la sesión solemne del Cabildo por el aniversario 471 de la fundación de la ciudad, cuyo orador huésped, como informamos en nota aparte, fue Jorge H. Alvarez Rendón.
La sesión solemne se efectuó en el Olimpo y también contó con la presencia de Marcos Celis Quintal, presidente del Tribunal Superior de Justicia; Luis Echeverría Navarro, del Poder Legislativo; representantes de la X Región Militar y la IX Zona Naval, y los ex alcaldes Ana Rosa Payán Cervera y Luis Correa Mena.- A.A.V.
De un vistazo
Aplausos
Todas las autoridades que acudieron a la sesión solemne fueron aplaudidas al ser presentadas en la ceremonia, que empezó puntual, a las 18 horas, y concluyó una hora y 10 minutos después.
Mérida “es plural, diversa y nuestra”
Ciudad ni maya ni española, sino una suma galante
“Mérida no es lugar de los seis adoratorios. No es un perímetro de ruinas conquistadas y no hay aquí motivos de lamentos. No tenemos razones valederas para ignorar nuestros orígenes y opacar la actualidad”, añadió.
Ante autoridades e invitados, afirmó que “Mérida no es maya. No la levantó el pueblo sabio que dejara en piedra una espléndida caligrafía de misterios.
“Poco a poco, tenazmente, década por década, la erigieron otros hombres, los venidos de Europa y los hijos de estos, de piel blanca o cobriza”.
Repito, siguió el cronista, Mérida no es maya. “Se levantó sobre las ruinas, los diseminados restos de un gran pueblo que en el siglo XVI, para el instante del encuentro de culturas, había quedado reducido a cacicazgos monteses después de levantar -y perder- ciudades visitadas por el fuego de la grandeza intelectual”.
Álvarez Rendón afirmó que “Mérida tampoco es española, aunque en los comienzos de su laberinto haya un nardo, una azucena y un rosal de Castilla. Mérida es una suma de orígenes.
“Que los ocupantes de Altabrisa asuman los desvelos de San Camilo, que los vecinos de Brisas atisben por los abiertos postigos de la Emiliano Zapata sur, que Itzimná se siente a platicar con la colonia Canto y los muchachos de la Francisco I. Madero no teman pararse un momento en jardines de Buenavista”.