Noticias de Yucatán
Hoy, un nuevo capítulo boxístico entre México y Puerto Rico
Cobijado por cientos de mexicanos, Saúl “Canelo” Álvarez superó ayer la báscula y se declaró listo para disputar hoy una de las peleas más importantes de su carrera, ante el puertorriqueño Miguel Ángel Cotto.
“Canelo” Álvarez marcó 155 libras, el límite del peso pactado, mientras que Cotto pesó 153.5.
El mexicano buscará que- darse con el cetro medio del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), del cual fue desconocido Cotto, al no pagar lo que estimula el reglamento antes de cada pelea, unos 300 mil dólares.
“Tengo que poner todo de mí arriba, entregar el 100 por ciento, me preparé para dar lo mejor de mí y salir con la mano en alto”, dijo el tapatío al ser entrevistado al término de la ceremonia.
No quiso hablar de su rival, aunque dejó en claro que “yo hice mi trabajo, sé lo que traigo, sé el rival que tengo enfrente, me preparé para él y estamos listos para el reto”.
Miguel Cotto, por su parte, se mostró tranquilo, listo pa- ra afrontarla y disfrutar la pelea de la mano de su en trenador Freddie Roach. Al término de la ceremonia, “Junito” saludó deportiva- mente al “Canelo” y a gente del equipo del mexicano.
Una vieja rivalidad
Los dos son boxeadores con estilos completamente diferentes, algo que garantiza revivir una de las rivalidades (México Vs. Puerto Rico) más grandes que hay dentro del boxeo profesional, que lleva décadas de existencia desde que en 1934 el boricua Sixto Escobar derrotó al mexicano Rodolfo “Baby” Casanova.
Cotto, de 35 años, ha con- seguido una segunda vida deportiva bajo la dirección del legendario
Roach, tras dejar al cubano Pedro Luis Díaz, y un triunfo lo pondría de nuevo en una posición para realizar otra pelea millonaria, aunque dentro de una categoría inferior.
“Sé lo que significa la ri- validad entre nuestros dos países cuando subimos a un cuadrilátero y estoy listo para la guerra”, declaró Cotto, que llega a la pelea con marca de 40-4, 33 triunfos por la vía del nocaut. “No sólo me he preparado mejor que nunca, además tengo experiencia, potencia en mis golpes y soy superior a mi rival”.
Cotto se mantiene como una de las más grandes estrellas del boxeo puertorriqueño durante años al ser el primer púgil de su país en ganar títulos mundiales en cuatro categorías diferentes.
Álvarez, de sólo 25 años, ya llega a la pelea como ex campeón del mundo del peso mediano júnior y con marca de 45-1-1, incluidas 32 victorias conseguidas por la vía rápida.
“Hay una gran historia entre México y Puerto Rico, y estoy seguro que la que voy a protagonizar también entrará en los libros de las mejores de todos los tiempos”, destacó Álvarez.
Un pleito rápido
Bajo la dirección de Roach, Cotto ha adquirido velocidad en sus piernas y brazos a la hora de soltar golpes, que poseen una gran potencia y hacen daño por lo que Álvárez tendrá que cuidarse a la hora de no ser alcanzado por un golpe que le ponga en problemas.
La mejor definición de lo que puede ser la pelea entre Cotto y Álvarez la hizo Óscar de La Hoya: “La historia dice que cuando se enfrentan un boxeador puertorriqueño contra un mexicano, la emoción, el suspense y el intercambio de golpes están garantizados.
Hoy, un nuevo capítulo boxístico entre México y Puerto Rico
Cobijado por cientos de mexicanos, Saúl “Canelo” Álvarez superó ayer la báscula y se declaró listo para disputar hoy una de las peleas más importantes de su carrera, ante el puertorriqueño Miguel Ángel Cotto.
“Canelo” Álvarez marcó 155 libras, el límite del peso pactado, mientras que Cotto pesó 153.5.
El mexicano buscará que- darse con el cetro medio del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), del cual fue desconocido Cotto, al no pagar lo que estimula el reglamento antes de cada pelea, unos 300 mil dólares.
“Tengo que poner todo de mí arriba, entregar el 100 por ciento, me preparé para dar lo mejor de mí y salir con la mano en alto”, dijo el tapatío al ser entrevistado al término de la ceremonia.
No quiso hablar de su rival, aunque dejó en claro que “yo hice mi trabajo, sé lo que traigo, sé el rival que tengo enfrente, me preparé para él y estamos listos para el reto”.
Miguel Cotto, por su parte, se mostró tranquilo, listo pa- ra afrontarla y disfrutar la pelea de la mano de su en trenador Freddie Roach. Al término de la ceremonia, “Junito” saludó deportiva- mente al “Canelo” y a gente del equipo del mexicano.
Una vieja rivalidad
Los dos son boxeadores con estilos completamente diferentes, algo que garantiza revivir una de las rivalidades (México Vs. Puerto Rico) más grandes que hay dentro del boxeo profesional, que lleva décadas de existencia desde que en 1934 el boricua Sixto Escobar derrotó al mexicano Rodolfo “Baby” Casanova.
Cotto, de 35 años, ha con- seguido una segunda vida deportiva bajo la dirección del legendario
Roach, tras dejar al cubano Pedro Luis Díaz, y un triunfo lo pondría de nuevo en una posición para realizar otra pelea millonaria, aunque dentro de una categoría inferior.
“Sé lo que significa la ri- validad entre nuestros dos países cuando subimos a un cuadrilátero y estoy listo para la guerra”, declaró Cotto, que llega a la pelea con marca de 40-4, 33 triunfos por la vía del nocaut. “No sólo me he preparado mejor que nunca, además tengo experiencia, potencia en mis golpes y soy superior a mi rival”.
Cotto se mantiene como una de las más grandes estrellas del boxeo puertorriqueño durante años al ser el primer púgil de su país en ganar títulos mundiales en cuatro categorías diferentes.
Álvarez, de sólo 25 años, ya llega a la pelea como ex campeón del mundo del peso mediano júnior y con marca de 45-1-1, incluidas 32 victorias conseguidas por la vía rápida.
“Hay una gran historia entre México y Puerto Rico, y estoy seguro que la que voy a protagonizar también entrará en los libros de las mejores de todos los tiempos”, destacó Álvarez.
Un pleito rápido
Bajo la dirección de Roach, Cotto ha adquirido velocidad en sus piernas y brazos a la hora de soltar golpes, que poseen una gran potencia y hacen daño por lo que Álvárez tendrá que cuidarse a la hora de no ser alcanzado por un golpe que le ponga en problemas.
La mejor definición de lo que puede ser la pelea entre Cotto y Álvarez la hizo Óscar de La Hoya: “La historia dice que cuando se enfrentan un boxeador puertorriqueño contra un mexicano, la emoción, el suspense y el intercambio de golpes están garantizados.