Noticias de Yucatán
Fuerte incendio destruyó ayer casi por completo dos naves de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, ubicada en la calle 70 entre 65 y 67 del centro de Mérida.
De acuerdo con el vigilante del templo, a las 5:20 de la tarde vio que de una galera salía humo, de modo que de inmediato dio aviso a los bomberos, quienes llegaron en menos de quince minutos al inmueble.
Al llegar las unidades de bomberos de la Secretaría de Seguridad Pública, el fuego ya había avanzado en gran parte de la primera nave y siguió hacia la otra, debido a que ambas están construidas con tablaroca y fibrocreto; las galeras servían como auditorio y salones de clases, así que tenían sillas, cortinas, alfombra y otros materiales inflamables.
Por fortuna, en el lugar sólo se encontraban dos personas, a parte del vigilante, las cuales salieron al ver el fuego.
“Estaba dando mi ronda cuando vi que de un salón estaba saliendo humo, avisé a los bomberos y cuando llegaron ya estaba el fuego intenso. Aunque tratamos de apagarlo con extintores, no lo logramos, los bomberos nos dijeron que salgamos para que no nos vayamos a accidentar”, dijo Roque Chan, vigilante del lugar.
El fuego se salió de control por unos minutos, pero los tragahumos lograron controlarlo. La operación fue conjunta entre varias corporaciones. Participaron unos 180 elementos entre bomberos, agentes de la Secretaría de Seguridad Pública, de la Policía Municipal, Protección Civil y la Cruz Roja.
Se cerraron las calles 65 entre 70 y 72, y 72, desde la 63 hasta la 67.
Los estudiantes de la escuela “Felipe Carrillo Puerto” fueron desalojados. También vecinos de los alrededores, sobre todo de las calles 65 y 72, ya que el viento soplaba de Oriente a Poniente y se temía que el fuego afectara las viviendas.
Los agentes de la SSP fueron coordinados por el comandante Fernando Zacarías Laines, y los bomberos, por el comandante Jorge Carlos Flores Martínez, quienes estuvieron en el lugar.
El fuego fue controlado cerca de las seis y media de la tarde, las llamas arrasaron con todo el mobiliario y el techo de la estructura se pandeó por el calor.
Fuerte incendio destruyó ayer casi por completo dos naves de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, ubicada en la calle 70 entre 65 y 67 del centro de Mérida.
De acuerdo con el vigilante del templo, a las 5:20 de la tarde vio que de una galera salía humo, de modo que de inmediato dio aviso a los bomberos, quienes llegaron en menos de quince minutos al inmueble.
Al llegar las unidades de bomberos de la Secretaría de Seguridad Pública, el fuego ya había avanzado en gran parte de la primera nave y siguió hacia la otra, debido a que ambas están construidas con tablaroca y fibrocreto; las galeras servían como auditorio y salones de clases, así que tenían sillas, cortinas, alfombra y otros materiales inflamables.
Por fortuna, en el lugar sólo se encontraban dos personas, a parte del vigilante, las cuales salieron al ver el fuego.
“Estaba dando mi ronda cuando vi que de un salón estaba saliendo humo, avisé a los bomberos y cuando llegaron ya estaba el fuego intenso. Aunque tratamos de apagarlo con extintores, no lo logramos, los bomberos nos dijeron que salgamos para que no nos vayamos a accidentar”, dijo Roque Chan, vigilante del lugar.
El fuego se salió de control por unos minutos, pero los tragahumos lograron controlarlo. La operación fue conjunta entre varias corporaciones. Participaron unos 180 elementos entre bomberos, agentes de la Secretaría de Seguridad Pública, de la Policía Municipal, Protección Civil y la Cruz Roja.
Se cerraron las calles 65 entre 70 y 72, y 72, desde la 63 hasta la 67.
Los estudiantes de la escuela “Felipe Carrillo Puerto” fueron desalojados. También vecinos de los alrededores, sobre todo de las calles 65 y 72, ya que el viento soplaba de Oriente a Poniente y se temía que el fuego afectara las viviendas.
Los agentes de la SSP fueron coordinados por el comandante Fernando Zacarías Laines, y los bomberos, por el comandante Jorge Carlos Flores Martínez, quienes estuvieron en el lugar.
El fuego fue controlado cerca de las seis y media de la tarde, las llamas arrasaron con todo el mobiliario y el techo de la estructura se pandeó por el calor.
