La Pontificia Universidad Gregoriana acogía el 15 de febrero, por primera vez, a 19 estudiantes de un curso que abre un nuevo camino en la Iglesia católica. Provenientes de Europa, América, Asia y África, los alumnos se preparan para ser la punta de lanza en la lucha contra la pederastia en el clero. Cuando a mitad de junio terminen las clases, serán los primeros diplomados en Protección de Menores y contarán con una formación específica que les hará muy valiosos en tres ámbitos básicos de actuación frente a este problema. El primero es el establecimiento de protocolos en sus diócesis, congregaciones y comunidades religiosas para evitar que se produzcan abusos a niños y adolescentes. El segundo, el tratamiento psicológico a las víctimas y a los victimarios. Y el tercero, el procedimiento para llevar ante los tribunales civiles y eclesiásticos a quienes cometen estos actos, los encubren o no luchan con suficiente ahínco contra ellos.
El diploma en Protección de Menores es fruto del trabajo preparatorio del Centro para la Protección de Menores (CPM) –el organismo dirigido por el jesuita alemán Hans Zollner, presidente del CPM, y la experta belga Karlijn Demasure–, dedicado a la lucha contra los abusos sexuales a niños y adolescentes. Esta institución ya lanzó el año pasado un curso por Internet para que los eclesiásticos aprendieran a establecer protocolos que eviten la pederastia y sepan cómo responder cuando se produce un caso. Demasure cuenta que las clases para alcanzar el diploma cuentan con “seminarios presenciales” en los que se aborda la cuestión “desde una perspectiva interdisciplinar y con un formato interactivo”.
“Para cada uno de los temas, se invita a un experto en la materia que viene a compartir su conocimiento e intercambiar ideas con los estudiantes. A su vez, los alumnos aprenden a utilizar y gestionar el programa de aprendizaje a distancia para la protección de menores. Dicho programa ofrece el conocimiento necesario para tratar de forma profesional y adecuada con víctimas de abuso sexual y sus familias, así como actuar para proteger a los menores”, explica la directora ejecutiva del CPM a Vida Nueva. El curso a través de Internet ya ha sido completado por varias instituciones eclesiásticas provenientes de Chile e India, mientras que otros interesados de Alemania, Ecuador y Ghana están ahora mismo siguiéndolo. “El programa deelearning se encuentra en fase de desarrollo –cuenta Demasure–. A día de hoy, hay doce unidades disponibles en inglés y seis en español y alemán. A finales de abril, las doce prime- ras unidades estarán disponibles también en lengua española”.
El diploma en Protección de Menores es fruto del trabajo preparatorio del Centro para la Protección de Menores (CPM) –el organismo dirigido por el jesuita alemán Hans Zollner, presidente del CPM, y la experta belga Karlijn Demasure–, dedicado a la lucha contra los abusos sexuales a niños y adolescentes. Esta institución ya lanzó el año pasado un curso por Internet para que los eclesiásticos aprendieran a establecer protocolos que eviten la pederastia y sepan cómo responder cuando se produce un caso. Demasure cuenta que las clases para alcanzar el diploma cuentan con “seminarios presenciales” en los que se aborda la cuestión “desde una perspectiva interdisciplinar y con un formato interactivo”.
“Para cada uno de los temas, se invita a un experto en la materia que viene a compartir su conocimiento e intercambiar ideas con los estudiantes. A su vez, los alumnos aprenden a utilizar y gestionar el programa de aprendizaje a distancia para la protección de menores. Dicho programa ofrece el conocimiento necesario para tratar de forma profesional y adecuada con víctimas de abuso sexual y sus familias, así como actuar para proteger a los menores”, explica la directora ejecutiva del CPM a Vida Nueva. El curso a través de Internet ya ha sido completado por varias instituciones eclesiásticas provenientes de Chile e India, mientras que otros interesados de Alemania, Ecuador y Ghana están ahora mismo siguiéndolo. “El programa deelearning se encuentra en fase de desarrollo –cuenta Demasure–. A día de hoy, hay doce unidades disponibles en inglés y seis en español y alemán. A finales de abril, las doce prime- ras unidades estarán disponibles también en lengua española”.