El papa Francisco ha dado hoy “un significativo abrazo” a un grupo de cincuenta ex prostitutas y transexuales procedentes de diversas partes del mundo en el Vaticano, informó la Santa Sede.
El diario vaticano “L’Osservatore Romano” explicó que el abrazo se produjo después de que el papa Francisco presidiera la audiencia extraordinaria de este sábado, en el marco del Año Santo de la Misericordia, que concluye el próximo 20 de noviembre.
Estas personas, procedentes de diez países -aunque el diario no cita cuáles-, fueron en el pasado víctimas de la prostitución y de la trata de personas, y actualmente reciben asistencia de una asociación solidaria que opera en la zona de Reggio Emilia (norte).
Además, el papa también ha saludado en la plaza de San Pedro del Vaticano a tres presos que cumplen condena en Milán -dos con cadena perpetua y otro castigado a quince años de cárcel-, y que hace meses le habían escrito una carta y le habían enviado 12.000 hostias sagradas que ellos mismos habían realizado en el presidio.
Los encarcelados, que acudieron a la plaza vaticana, han sido identificados por el periódico como Cristiano Vallanzano, Ciro D’Amora y Giuseppe Ferlito.
Los tres participaron con esta iniciativa en el proyecto promovido por la Fundación Casa dello Spirito e delle Arti que, en las cárceles más grandes de Italia, trabajan con los internos en la producción de esas obleas.
El diario vaticano “L’Osservatore Romano” explicó que el abrazo se produjo después de que el papa Francisco presidiera la audiencia extraordinaria de este sábado, en el marco del Año Santo de la Misericordia, que concluye el próximo 20 de noviembre.
Estas personas, procedentes de diez países -aunque el diario no cita cuáles-, fueron en el pasado víctimas de la prostitución y de la trata de personas, y actualmente reciben asistencia de una asociación solidaria que opera en la zona de Reggio Emilia (norte).
Además, el papa también ha saludado en la plaza de San Pedro del Vaticano a tres presos que cumplen condena en Milán -dos con cadena perpetua y otro castigado a quince años de cárcel-, y que hace meses le habían escrito una carta y le habían enviado 12.000 hostias sagradas que ellos mismos habían realizado en el presidio.
Los encarcelados, que acudieron a la plaza vaticana, han sido identificados por el periódico como Cristiano Vallanzano, Ciro D’Amora y Giuseppe Ferlito.
Los tres participaron con esta iniciativa en el proyecto promovido por la Fundación Casa dello Spirito e delle Arti que, en las cárceles más grandes de Italia, trabajan con los internos en la producción de esas obleas.