Noticias de Yucatán
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Una turista de origen alemán fue arrollada por un autobús de pasajeros de la ruta Cd. Caucel-Animaya, este viernes a las 8:45 de la mañana en el cruce de las calles 66 con 63 del Centro Histórico.
De acuerdo con la información, Laura Göettinger, de 28 años de edad, se dirigía a impartir clases de su idioma natal abordo de su bicicleta marca Mercurio, sin placas, sobre la calle 66 y luego de pasar el crucero de la calle 66 rumbo al sur, fue colisionada por el camión de transporte público, también sin placas, con número económico 408, manejado por Alejandro Israel Márquez Chi, quien transitaba sobre la 66 y dio vuelta en esa esquina.
Según testigos la mujer salvó la vida de milagro ya que habría quedado debajo de la pesada unidad que por fortuna frenó antes de que le pasaran las llantas.
Con la intervención de los agentes de vialidad de la Policía Municipal, ambas partes llegaron a un acuerdo en el que el chofer del camión se hizo responsable y se comprometió a pagar la reparación de la bicicleta y en ese momento fue llevada al taller. La extranjera no reclamó por las heridas.
Una turista de origen alemán fue arrollada por un autobús de pasajeros de la ruta Cd. Caucel-Animaya, este viernes a las 8:45 de la mañana en el cruce de las calles 66 con 63 del Centro Histórico.
De acuerdo con la información, Laura Göettinger, de 28 años de edad, se dirigía a impartir clases de su idioma natal abordo de su bicicleta marca Mercurio, sin placas, sobre la calle 66 y luego de pasar el crucero de la calle 66 rumbo al sur, fue colisionada por el camión de transporte público, también sin placas, con número económico 408, manejado por Alejandro Israel Márquez Chi, quien transitaba sobre la 66 y dio vuelta en esa esquina.
Según testigos la mujer salvó la vida de milagro ya que habría quedado debajo de la pesada unidad que por fortuna frenó antes de que le pasaran las llantas.
Con la intervención de los agentes de vialidad de la Policía Municipal, ambas partes llegaron a un acuerdo en el que el chofer del camión se hizo responsable y se comprometió a pagar la reparación de la bicicleta y en ese momento fue llevada al taller. La extranjera no reclamó por las heridas.
