Noticias de Yucatán
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Los festejos del Día de La Marina en el puerto de abrigo de Chuburná terminaron el miércoles poco después de las 8 de la noche y, según los pescadores, supuestamente todos se retiraron a sus casas y sólo se quedó el velador.
Pero el jueves, a las 10 de la mañana, Fernando Caamal, vigilante del puerto de abrigo, al recorrer los muelles encontró un cuerpo flotando en la dársena, pegado al muro de los muelles.
El ahogado resultó ser el pescador Alfredo Pool Aké, de 65 años de edad, a quien según los pescadores vieron el miércoles durante los festejos del Día de la Marina, pero no se dieron cuenta si estaba bebiendo ni se percataron si se quedó en el refugio pesquero.
—Es “Tapa”, se ahogó, parece que se cayó en la dársena —comentaron pescadores que llegaron al mediodía al puerto de abrigo, al correr la noticia de que un pescador fue hallado muerto.
Alfredo Ek, comentaron los pescadores, enviudó hace tres años; además de pescador trabajaba en una tienda de materiales de construcción y era parte del grupo de custodios de la Virgen de la Purísima Concepción.
Mercy Pool, hija del finado y quien identificó el cuerpo de su padre, comentó que él no pasó la noche en su casa, así que piensa que se quedó en el puerto de abrigo e ignoran qué ocurrió.
El pescador se ahogó en la noche, el cuerpo salió a flote en la misma dársena y quedó en medio de las lanchas; debido a que no hay corrientes en esa zona, el cadáver no fue sacado al mar.
Al puerto de abrigo llegaron agentes de la Policía Municipal, Secretaría de Seguridad Pública, elementos de la Armada de México y agentes de la Policía Ministerial y Fiscalía.
También llegó personal del Servicio Médico Forense para rescatar el cuerpo, pero como estaba entre las lanchas ribereñas, se pidió el apoyo de los pescadores y con una embarcación rescataron el cuerpo para que los fotógrafos de la Fiscalía pudieran tomar fotos y los agentes lo revisaran para ver si presentaba golpes.
Los agentes indicaron a los familiares que solicitaran los servicios de una funeraria para que se llevaran el cuerpo, pues ya no lo llevarían a Mérida. Los familiares y pescadores se hicieron cargo de llevar el cuerpo a casa del infortunado para su velorio.
Los festejos del Día de La Marina en el puerto de abrigo de Chuburná terminaron el miércoles poco después de las 8 de la noche y, según los pescadores, supuestamente todos se retiraron a sus casas y sólo se quedó el velador.
Pero el jueves, a las 10 de la mañana, Fernando Caamal, vigilante del puerto de abrigo, al recorrer los muelles encontró un cuerpo flotando en la dársena, pegado al muro de los muelles.
El ahogado resultó ser el pescador Alfredo Pool Aké, de 65 años de edad, a quien según los pescadores vieron el miércoles durante los festejos del Día de la Marina, pero no se dieron cuenta si estaba bebiendo ni se percataron si se quedó en el refugio pesquero.
—Es “Tapa”, se ahogó, parece que se cayó en la dársena —comentaron pescadores que llegaron al mediodía al puerto de abrigo, al correr la noticia de que un pescador fue hallado muerto.
Alfredo Ek, comentaron los pescadores, enviudó hace tres años; además de pescador trabajaba en una tienda de materiales de construcción y era parte del grupo de custodios de la Virgen de la Purísima Concepción.
Mercy Pool, hija del finado y quien identificó el cuerpo de su padre, comentó que él no pasó la noche en su casa, así que piensa que se quedó en el puerto de abrigo e ignoran qué ocurrió.
El pescador se ahogó en la noche, el cuerpo salió a flote en la misma dársena y quedó en medio de las lanchas; debido a que no hay corrientes en esa zona, el cadáver no fue sacado al mar.
Al puerto de abrigo llegaron agentes de la Policía Municipal, Secretaría de Seguridad Pública, elementos de la Armada de México y agentes de la Policía Ministerial y Fiscalía.
También llegó personal del Servicio Médico Forense para rescatar el cuerpo, pero como estaba entre las lanchas ribereñas, se pidió el apoyo de los pescadores y con una embarcación rescataron el cuerpo para que los fotógrafos de la Fiscalía pudieran tomar fotos y los agentes lo revisaran para ver si presentaba golpes.
Los agentes indicaron a los familiares que solicitaran los servicios de una funeraria para que se llevaran el cuerpo, pues ya no lo llevarían a Mérida. Los familiares y pescadores se hicieron cargo de llevar el cuerpo a casa del infortunado para su velorio.
