Víctima de un infarto agudo al miocardio, hoy a las 10 de la mañana falleció en esta ciudad Don Miguel Aarón Echeverría Ontiveros, conocido popularmente como “Miguelito, el Rey de los Pastelitos”, quien durante más de medio siglo se dedicó a vender sus productos en los juegos de pelota en el desaparecido campo “Carta Clara” y luego en estadio “Kukulcán”, hoy “Kukulcán – Alamo”.
“Miguelito”nació en Mérida, creció en Hocabá,alcanzó fama nacional e internacional debido a sus pastelitos
de calidad y a su gran simpatía, además de ser conocido por su forma de anunciarse con gran ritmo en los estadios y en cualquier lugar donde promocionaba su venta: “Se oye el rumor de un pregonar, que dice así, que Miguelito aquí está, llegó…”
Para tal efecto usaba la tonada de la canción “El Yerberito” que interpretaba la extinta cubana Celia Cruz y al final de su pregón exclamaba. “Que lloren niños, que lloren”, porque según él, los chamacos suplicaban a sus papás que les compren sus pastelitos y cuando los señores no accedían, sus hijos lloraban y finalmente, los padres complacían a sus vástagos.
“Miguelito” estaba enfermo y desde hace 12 años se retiró de su actividad por motivos de salud, vivía de la ayuda que le daban sus conocidos y amigos y en julio pasado, durante el partido de béisbol entre Diablos y Leones, asistió el “Kukulcánb – Alamo” e hizo una colecta entre los aficionados, los cuales de manera generosa respondieron al llamado.
Esta misma tarde la directiva de las fieras publicaron en su cuenta de Facebook un mensaje de condolencia por la pérdida de este popular personaje cuyo cuerpo es velado en una funeraria de la ciudad de Umán, en cuyo cementerio será sepultado este domingo. Descanse en paz.
a
Cabe recordar que en agosto pasado algunos medios dieron como muerto a Miguelito, pero todo se trató de una confusión.
El propio personaje dijo que su supuesta "muerte" porque su nombre fue ligado al de una persona fallecida en Mérida y cuya esquela apareció en medios impresos, por lo que lo dieron por “muerto”.
Pero en realidad, el fallecido no era este conocido personaje, sino Miguel José de Jesús López Pacheco, quien era muy apreciado en los circulos religiosos de la iglesia católica en Mérida y a quien también le apodaban Miguelito.
