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El Ayuntamiento de Guadalajara ha puesto el ejemplo a su similar de Mérida, luego de que en días pasados presentara el nuevo modelo de calandria eléctrica en la capital de Jalisco, con el cual se sustituirán las tradicionales impulsadas por caballos.
Los vehículos son muy similares a la tirados por caballos, pero son impulsados con baterías recargables en cualquier toma de corriente de 110 voltios, por lo que no se requieren estaciones especiales para que los motores de las calandrias se alimenten.
El alcalde de Guadalajara, Enrique Alfaro, anunció que en total serán reemplazados 55 unidades y que los automotores serán entregados a los ‘calandrieros’ en un comodato de 99 años.
Las unidades son tal cual a una calandria tradicional, de manera que la única modificación es que no tiene caballo.
Usan baterías de litio que tienen un tiempo de vida de 10 años, aunque hay otras más económicas con pilas de plomos, menos durables.
Las unidades tienen capacidad para seis pasajeros, más el conductor y el copiloto; su peso aproximado es de 900 kilogramos y el motor eléctrico de 10 Hp. le permite alcanzar una velocidad de 25 kilómetros.
La autonomía estimada es de 45 km con pasajeros, suficientes para dar hasta seis vueltas en un recorrido como los que hacen en Mérida, donde viajan del Centro al Paseo de Montejo y retornan al punto de partida.
En Guadalajara se informó que las unidades no son baratas, pues cuestan $500,000, pero se harán convenios con patrocinadores para que éstos cubran los costos a cambio de explotar la publicidad en las calandrias, vehicular celos que en Mérida son conocidas como calesas.
El cambio de las calesas en la capital jalisciense será paulatino, pues las primeras 10 comenzarían a circular en diciembre; para abril de 2018 circularán 23 más y para agosto de 2018 transitarán las 22 restantes.
En Mérida, las calesas no sobrepasan las 20 unidades, pero cada vez es más frecuente las quejas por el trato al que son sometidos los caballos.
El año pasado se registró la muerte violenta de un caballo calesero que se desbocó y se estreló contra un minibús en el rumbo de Mejorada.
Los caleseros están constituidos en La Unión de Conductores y Pequeños Propietarios de Carruajes de Yucatán, que se supone que cada miércoles llevan a cinco de sus animales a una revisión general a la Facultad de Veterinaria de la Uady. Información de Formal Prisión
