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Los XV años de una chica sirvieron para romper la anticuada tradición de bailar un vals y vestirse como princesa en uno de los días más recordados en la vida de cualquiera (ya sea porque hiciste el oso o porque te divertiste como nunca a tan corta edad).
Esto porque la reina de la casa y dueña de las quincenas no iba a permitir que los amigos de su hija se aburrieran, así que aceptó el reto de rapear junto a su retoñoen una épica batalla que se viralizó rápidamente en redes sociales.
Esperen, todo suena bonito. Lo cierto es que en medio de la disputa ambas se lanzaron una que otra indirecta que sacó a relucir lo que les disgusta de la otra. Temas como la falta al cuidado de la casa por parte de la chica y la poca comprensión de moda de la señora.
No obstante, el incómodo momento terminó en una tierna escena, pues la quinceañera le agradeció a su contrincante haber destinado parte de sus recursos personales para la fiesta y la declaró ganadora de la pelea. El Debate.
Los XV años de una chica sirvieron para romper la anticuada tradición de bailar un vals y vestirse como princesa en uno de los días más recordados en la vida de cualquiera (ya sea porque hiciste el oso o porque te divertiste como nunca a tan corta edad).
Esto porque la reina de la casa y dueña de las quincenas no iba a permitir que los amigos de su hija se aburrieran, así que aceptó el reto de rapear junto a su retoñoen una épica batalla que se viralizó rápidamente en redes sociales.
Esperen, todo suena bonito. Lo cierto es que en medio de la disputa ambas se lanzaron una que otra indirecta que sacó a relucir lo que les disgusta de la otra. Temas como la falta al cuidado de la casa por parte de la chica y la poca comprensión de moda de la señora.
No obstante, el incómodo momento terminó en una tierna escena, pues la quinceañera le agradeció a su contrincante haber destinado parte de sus recursos personales para la fiesta y la declaró ganadora de la pelea. El Debate.
