Las autoridades encontraron a Orfa Santos L., quien en octubre pasado abandonó a sus cuatro hijas para “no matarlas” en la extrema pobreza. Aunque al principio se rehusó a volver, su cuñada logró convencerla.
La familia vivía en un predio de la colonia Oaxaqueña. Sin embargo, tras fallecer la pareja de la madre, ésta decidió irse a vivir con su primer esposo a un rancho llamado “La Sorpresa”, ubicado en la comunidad Cenote Azul en Tizimín.
Viven en condiciones insalubres
Tras la muerte de su pareja, Orfa Santos dejó a sus hijas al cuidado de su cuñada María de Jesús.
Las menores, María Herminia, María del Carmen, María Inés y María Valentina vivían en extrema pobreza y condiciones insalubres, tanto que ni siquiera tenían un baño para sus necesidades fisiológicas, las cuales hacían al aire libre en el patio de la casa. Todas dormían en un cuartito del Fonden, donde colocaban al menos cinco hamacas.
Toman cartas en el asunto
El DIF Municipal y la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia tomaron cartas en el asunto, brindándoles atención médica y psicológica a las pequeñas.
Por su parte, la presidenta del DIF Municipal, Anahí Novelo Carvajal, ofreció otorgarles una despensa cada 15 días, pero además dijo que era urgente localizar a la madre.
Dos personas altruistas de la ciudad, Luis German Moguel Pech y Silvia Dzib Noh,viajaron a Tizimín para solicitar el apoyo de la Policía Municipal y Estatal.
Gracias a sus acciones localizaron a Orfa Santos en el rancho “La Sorpresa”, en una ranchería denominada Cenote Azul, por el rumbo del Cuyo.
No quería regresar
La madre de las pequeñas no quiso regresar por la noche del miércoles, por lo que este jueves realizaron un operativo entre la Policía Municipal de Tizimín y la estatal. Los elementos volvieron al rancho y llevaron a su cuñada para que la convenza. Tras medio día de negociaciones lograron que acepte volver.
Posteriormente, la Policía estatal se encargó de trasladar a la madre de las menores, acompañada con su ex esposo de nombre “Hilario”, pero solo dejaron a la tía en la casa y a los involucrados los llevaron directamente al DIF Municipal para ponerlos a disposición de la Promedefa.
De acuerdo con la información obtenida, arribó una representante de la Promedefa de la ciudad de Mérida y ella se encargó de viajar con los uniformados hasta el lugar en donde se encontraba la madre de las pequeñas.
No vio a sus hijas
La mamá de las niñas arribó a esta ciudad alrededor de las tres de la tarde, pero no vio a sus hijas, ya que la trasladaron a las oficinas de la Promedefa, en donde, presuntamente, declarará sobre los hechos que la obligaron abandonar a sus pequeñas.
Se comentó que la mujer dijo desde el rancho que no podría tener con ella a sus pequeñas, debido a que no tiene dinero para mantenerlas. Megamedia.