Fénix Fernández Salinas cumplió 10 años en febrero,
pero desde hace cinco ya estaba emocionado con las palabras. Construía vocablos
y letras, componía conceptos para narrar lo que su imaginación le dictaba. Le
gusta contar historias y, con ocho años, publicó su primer libro.
Su cuento "El Arquero del Rey", basado en la
realeza y en los guerreros con mala puntería, fue seleccionado de entre 700
relatos a nivel nacional a través de la convocatoria de El Pequeño Gran
Escritor 2017, fue uno de los tres ganadores y con ello ganó que su historia
fuera ilustrada, publicada y presentada en la Feria Internacional del
Libro de Guadalajara.
"Me encanta la arquería, cuando empecé a escribir el
cuento pensaba en axilas apestosas, era una mezcla muy interesante y empecé a
escribir con eso.
"Siempre rayaba garabatos, me inventaba letras,
palabras, desde que era bebé quise aprender a leer y, cuando lo hice, quise saber
cómo escribir. Luego me interesó empezar a hacer cuentillos para que alguien me
publicara y desde que me inscribí en el concurso tenía la esperanza de
ganar", relata el pequeño tapatío.
Pero ése no es su primer cuento, escribe desde que tiene
cinco años de edad. Su primer relato fue "Las Estatuas Vivientes",
una historia de cuatro páginas. Ahora le da pena, porque las efigies eran
inofensivas y su protagonista era Juanito, un niño de marfil, pero a la
distancia le parece un poco "ñoño". Ahora lo que le interesa es
narrar historias de misterio, suspenso y comedia
"Me gusta mucho escribir porque tengo mucha
imaginación, siempre se me ocurren cosas, me gusta que la gente se sorprenda
con lo que les cuento", confiesa.
Incursiona en el séptimo arte y es ejemplo en este Día del
Niño
Fénix también ha incursionado en el mundo del cine y del
teatro, un poco por herencia de sus padres Álvaro Fernández y Olimpia
Salinas. Ha dirigido ya sus primeros cortometrajes de la mano de su papá, como
"The Ghost Side" y también es autor del cómic "Dinosaurios",
porque disfruta mucho su faceta de dibujante.
Cuando sea grande quiere ser diseñador de videojuegos y
director de cine para contar sus propias historias, pero ahora centra su
atención en la escritura de su primera novela, a la que ha llamado Another
World.
La narrativa se centra en Orión, un pequeño y solitario
mago, que tiene que ir a vivir con su abuelo y luego a un internado porque sus
padres son perseguidos por fuerzas oscuras, explica Fénix, quien también es un
ávido lector de autores como Juan Villoro y Oliver Jeffers.
"Quiero ser director de cine, diseñador de videojuegos,
escritor, sé que son muchas cosas a la vez, pero eso quiero hacer cuando esté
grande, porque una vez que te conviertes en escritor no hay vuelta atrás,
tienes que seguir escribiendo", advierte.
Reforma