El pasado 9 de abril en el aeropuerto de Tirana
(Albania), ocurrió un espectacular robo, en el que un grupo de personas
armadas robaron varios millones de euros en efectivo de un avión que
estaba a punto de despegar con dirección a Viena, se cree que los delincuentes
huyeron en bicicleta.
De acuerdo a RT, los ladrones podrían haberse llevado
hasta 10 millones de euros (11,3 millones en dólares), según datos
provenientes de fuentes policiales pero no confirmados oficialmente.
Inicialmente los medios locales informaron que se trataba de 2 millones. El
atraco tuvo lugar en el momento en el que los pasajeros de un Airbus A320 de
Austrian Airlines estaban embarcando, por lo que muchos vieron el robo desde la
ventanilla.
El avión que debía transportar el dinero a Viena, era el
mismo en el que unas horas antes del atraco el presidente de Albania, Ilir
Meta, había viajado a Tirana desde la capital austriaca.
Los ladrones accedieron a la pista de despegue en un
vehículo caracterizado como furgoneta policial y llegaron al Airbus cuando
el personal de seguridad estaba introduciendo en el compartimento de carga las
bolsas con los billetes de euro. Tras amenazarles con rifles kaláshnikov y
obligarles a echarse al suelo, los ladrones se llevaron siete de las bolsas.
Toda la operación duró solo 90 segundos, estimaron en el
sitio informativo Shqiptarja.com.
Debido al robo, el despegue estuvo aplazado durante tres
horas, durante las cuales se desarrolló una persecución policial asistida desde
el aire por varios helicópteros. A dos kilómetros del aeropuerto los
criminales prendieron fuego a la furgoneta (que no quedó destruida por las
llamas), se repartieron las siete bolsas y escaparon, detalla la misma fuente
albanesa.
Uno de los presuntos atracadores fue abatido en esa misma
zona durante un tiroteo con la Policía. Según afirma Bild, era el cabecilla de
la banda criminal, y la Policía lo identificó como Admir Murataj, de 40 años,
un bandido que en 2013 se fugó de una cárcel griega donde cumplía una condena
de 127 años.
Sin embargo, las autoridades ponen en tela de juicio la
autenticidad de ese nombre, puesto que el muerto tenía al menos 13 identidades
falsas.
Al menos cuatro cómplices de Murataj se dieron a la fuga,
posiblemente en bicicletas u otro vehículo, según medios locales.
La Fiscalía de Delitos Graves de Albania creó un grupo de
investigación para detectar a todos los implicados.
Los investigadores han interrogado a 40 personas y anunciaron la detención de cuatro sospechosos, sin especificar si son los autores inmediatos del crimen.