La persistencia de las lluvias en gran parte de
Irán, mantiene en alerta a cinco localidades ante el riesgo de
inundaciones, las cuales hasta el momento han cobrado la vida de 76
personas y han dejado cuantiosos daños materiales.
La Agencia de Noticias de la República Islámica (IRNA)
informó que las fuertes precipitaciones pluviales afectaron a cerca del 70 por
ciento del territorio iraní, es decir, 28 de las 35 provincias, 270 grandes y
pequeñas ciudades y más de cinco mil aldeas.
En tanto, el portal de PressTV indicó que ante
el riesgo de inundaciones repentinas se mantienen en alerta las
provincias del sur de Fars, Hormozgan, Sistan y Baluchestán, del noreste de
Khorasan y Khorasan Razavi, así como en Khuzestan, ubicada al suroeste.
Ahad Vazifeh, representante de la Organización
Meteorológica, citado por la Agencia de Noticias Tashim, explicó que el
nivel del agua ha bajado en la mayor parte del país; sin embargo, se
pronostican lluvias fuertes en diversas regiones del territorio iraní.
Desde el 19 de marzo comenzaron las intensas lluvias,
ocasionando desbordamiento de ríos y presas, generando fuertes corrientes que
se llevaron casas, autos y la muerte de personas, por lo que se considera que
esta es la peor inundación en décadas en al menos 25 provincias.
Según reportes oficiales, las inundaciones afectaron
cerca de 14 mil kilómetros de carreteras nacionales, ocasionaron cortes de
suministro eléctrico en dos mil 400 poblados y falta de agua en tres mil 800
aldeas, entre otros.
El ministro de Energía, Reza Ardakanian, anotó que las
nuevas lluvias podrían generar desbordamiento de los ríos en la parte oriental
del país y recordó que el nivel de precipitación de este año alcanzó los 57
milímetros, en comparación con los 19 milímetros del año pasado.
Excélsior