La cadena de gasolineras Shell aseguró que los precios de los combustibles que ofrece son consistentes con su oferta de valor, además de que los mercados donde opera tiene una posición competitiva que se evidencia al analizar las diferencias en el precio de venta al público, las cuales son muy reducidas, lo mismo que el margen de ganancia.
De acuerdo con la compañía, el precio de venta al público de combustibles está compuesto por el costo de la molécula, logística y distribución que representa entre 60 y 65 por ciento, los impuestos en 25 o 30%, mientras que el margen de utilidad asciende hasta 10% que se divide entre el comercializador y el distribuidor.
En la conferencia diaria de Palacio Nacional, la titular de la Secretaría de Energía (Sener), Rocío Nahle, ofreció "quién es quién en los precios de las gasolinas", en donde reveló que las estaciones de servicio Shell ofrecen los precios promedio más elevados en territorio nacional.
En un comunicado, Shell México argumentó al respecto que si bien se ha registrado una reducción en el Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS), el incremento en el precio del crudo ha erosionado el impacto del gravamen en el precio final de los combustibles.
Y es que, detalló, al iniciar 2019 la mezcla mexicana de petróleo cotizó en 43.65 dólares por barril, mientras que para el 12 de abril alcanzó los 63.59 dólares por tonel, por lo que al ser este el insumo indispensable para producir gasolina, los precios de la molécula se ven automáticamente impactados.
“En los estados en los que operamos y donde ocupamos sitios óptimos para atender a nuestros clientes, mantenemos una posición competitiva que se evidencia al analizar las diferencias en el precio de venta al público, las cuales son muy reducidas”.
Además, expuso, las gasolineras Shell representan solo 1.0% del total de estaciones de servicio en el país, por lo que no son un actor preponderante que pueda impactar de manera decisiva en los precios de venta al público.
Para la firma, los precios de los combustibles de su marca son consistentes con su oferta de valor al cliente: combustibles de calidad desarrollados a partir de procesos de investigación y en los que invierte más de mil millones de dólares al año y que son desarrollados de la mano de su socio Scuderia Ferrari.
Además de factores como una infraestructura segura, limpia y eficiente; servicio personalizado; productos de calidad en tiendas de conveniencia, y personal capacitado y bien remunerado.
“Shell sabe que los clientes tienen una amplia variedad de opciones al momento de comprar combustibles. Los consumidores mexicanos saben escoger y escogen bien. Por ello, buscamos ofrecer un precio competitivo basado en productos y servicios diferenciados y que brindan un mejor rendimiento de los motores, así como una mejor experiencia de conducción”
La compañía agregó que también existen regiones con precios diferenciados en el país, ya que los estados fronterizos tienen un tratamiento fiscal distinto a los estados del centro y les permite tener acceso a combustibles más baratos, una distinción importante que debe considerarse para interpretar con mayor precisión la estructura de precios.
De acuerdo con la Sener, del 6 al 12 de abril de 2019, el promedio de precios más caro para la gasolina Magna se reportó en las estaciones Shell (20.23 pesos el litro) y la más económica en Petroseven (18.74 pesos), mientras que Pemex se ubica en un precio intermedio de 19.51 pesos.
En el caso de la gasolina Premium, Shell también es quien vende el combustible más caro (21.61 pesos por litro), en tanto que el combustible más barato se encuentra en Petroseven (20.35pesos).
En cuanto al diésel, del que se tienen menos comercializadores, Walmart reporta el más caro (21.75 pesos por litro), seguido de Shell (21.68 pesos); y el precio más accesible se encuentra en Rendichicas (20.54 pesos) y Arco (20.74 pesos).
El Universal