LONDRES,
Inglaterra.-Una familia de Newport, Shropshire, Inglaterra, casi murió
envenenada luego de exponerse a toxinas potencialmente mortales mientras
limpiaban la pecera de su casa, según informó Mirror.
Todo
ocurrió el pasado 6 de agosto cuando Katie Stevenson limpiaba su pecera, junto
a su esposo Mark y sus dos hijos. Inesperadamente, unos de los corales se
sintió en peligro y liberó una serie de toxinas en el aire que fueron inhaladas
por la familia.
La familia
comenzó a sentir una tos seca, que rápidamente se agravó a un dolor intenso de
garganta. Una hora más tarde, el cuadro se complicó con la presencia de
escalofríos y fiebre, que marcaba los 42ºC de temperatura.
Tras una
desesperada lucha por intentar respirar, la familia llamó al servicio de
emergencias y fueron trasladados a un hospital cercano con máscaras de oxígeno.
La policía y los bomberos tuvieron que acordonar su casa para no exponer a
otras personas de terminar envenenadas.
Afortunadamente,
tres de las hijas de Katie fueron dadas de alta al día siguiente, mientras que
el resto de los integrantes permanecieron bajo observación por al menos una
semana.
Katie, de
34 años, contó al sitio que sus hijos “podrían haber muerto“, debido a que el
veneno que inhalaron es uno de los más mortales para el ser humano.
También
dijo que el suceso fue tan traumático para ella que no ha “dormido bien desde
entonces“, ya que todo tipo de cosas pasaron por su cabeza desde ese momento.
Los médicos
le dijeron a Katie que si hubiera decidido irse a dormir para intentar
recomponerse, seguramente hubiera amanecido muerta.
Bles.