Debido a que recibía una golpiza por parte de su padre, un
veracruzano con poco corazón, un niño de 11 años se puso a gritar de tal forma
que llamó la atención de una persona que cruzaba por el lugar.
Entonces el testigo afortunadamente llamó a la policía, que
inmediatamente llegó a detener al padre.
El detenido aseguró que solamente le estaba dando un
escarmiento al menor, sin embargo, trascendió que el niño constantemente recibe
agresiones de parte de su progenitor.
Los hechos se presentaron en el Barrio de Santa Ana, en
donde padre e hijo tienen su domicilio. Al parecer la madre no vive con ellos,
y por eso el pequeño está expuesto a los constantes abusos de su papá.
El pequeño presentaba moretones en su carita y otras partes.
Los oficiales lo llevaron a la Procuraduría de la Defensa del Menor y la
Familia (Prodemefa) para determinar su situación legal.
Mientras que el severo padre fue subido a una patrulla y
enviado al Ministerio Público.
Fuente: Yucatán a la mano