De acuerdo con el portal de salud del Dr. Mecola, el
pepino es una fruta comúnmente confundida como vegetal, y que se compone de
entre 90 y 96 por ciento de agua, además contiene vitaminas, minerales, fibra y
antioxidantes.
Lo que hace al pepino una de las mejores frutas para
mantener hidratado al cuerpo y que este pueda llevar a cabo diversos procesos
internos, como la regulación de la temperatura, crucial para su buen funcionamiento.
Ingerirlo en forma de agua potencia sus beneficios, porque se suele
mezclar con otros alimentos.
Un pepino entero y sin pelar, de 300 gramos aporta 45
calorías, de las cuales 11 gramos son de carbohidratos, 2 g de proteína y 2 g
de fibra. Al preparar el agua de pepino se recomienda no quitarle la piel,
informa el portal de salud, Healthline, pues conservará más fibra y los
nutrientes que contiene.
Esta mayor cantidad de fibra ayudará a tu sistema
digestivo a estar más sano, evitando el estreñimiento e impulsando la
pérdida de peso, al ser bajo en calorías y contener mayor cantidad de agua,
señalan diversos Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos.
Sin olvidar que el pepino también brinda vitamina C, buena
contra las infecciones y vitamina K, un poderoso antiinflamatorio. Además de
contar con minerales como potasio y magnesio, buenos para el corazón; así como
manganeso, un constructor de huesos.
Otro de sus beneficios es que contribuye con
antioxidantes que reducen el riesgo de enfermedades cardíacas, pulmonares y
autoinmunes, según un estudio publicado en 2008, en la Revista Internacional de
Ciencias Biomédicas ("International Journal of Biomedical Science").
Por su parte, el limón del agua de pepino aporta vitaminas
del complejo B, vitamina C, minerales como calcio, potasio, hierro, magnesio y
antioxidantes. Lo que ayuda al sistema digestivo e inmunológico contra
enfermedades, evita la anemia y previene los cálculos renales, informa el Dr.
Mercola.
Prepárate una refrescante agua de pepino, ya que además
ayuda a reducir y controlar el azúcar en la sangre. Para hacerla solo necesitas
una pieza de pepino, agua, endulzante al gusto y un poco de jugo de limón,
aunque también puedes combinarla con chía, guayaba o jengibre.