Llamé al 911 cuando mi padre tenía problemas para
respirar, expuso Diana M.R la respuesta fue simple “señorita eso no lo vemos
aquí, y si le conseguimos una ambulancia puede tardar demasiado tiempo”, ¿Qué
hago? La respuesta que Diana espera es la que muchos yucatecos requieren cuando
pasan por esta situación de angustia.
El Gobierno del Estado de Yucatán ha recalcado mucho a
través de sus comunicados una línea donde se puede comunicar toda persona que
atraviese por una situación similar, quienes han tenido la oportunidad de
llamar a este teléfono 800 YUCATÁN (800 982 2826) para uso exclusivo de
personas que presenten síntomas del Coronavirus Covid 19, han encontrado un
verdadero alivio a su situación.
En promedio de 30 minutos con un equipamiento de primera
calidad en seguridad, cápsulas de aislamiento y sobre todo una vocación de servicio
poco vista, arriba a los hogares de yucatecos afectados por esta pandemia una
brigada de paramédicos a bordo de una ambulancia equipada con oxígeno que
permite estabilizar a los pacientes mientras van camino al hospital.
Diana nos comentó, “hay otros factores que me sorprenden
y que no conocía, la coordinación que tienen que tener para determinar a qué
hospital deben de llevar a mi familiar, todo depende de la disponibilidad de
las camas para que puedan prestar los cuidados intensivos necesarios, por respeto
al trabajo de ellos no puedo comentar finalmente donde llegamos, pero mi
gratitud y mi corazón siempre estará con ellos, como calma que te digan todo
estará bien, es un alivio”, dijo con llorosa voz.
Explica que no hay horario para enfermarse y entrada la
madrugada la incertidumbre hacía presa a su madre y hermanas y el tiempo de
espera parecía eterno, pero al fin a lo lejos la sirena de la ambulancia sonaba
y la esperanza volvía a mi casa, relató.
¿Qué mueve el humanismo de estas personas a arriesgar su
vida por servir a otros? La respuesta la tiene cada uno de ellos en su propio
interior, pero lo que ellos hacen merece el reconocimiento de todas las
personas porque ante una enfermedad aún desconocida por el lento avance en la
investigación, verdaderamente se la están rifando.
Muchos de ellos ayer en el marco de la celebración del
Día del Padre optaron por servir a su prójimo que pasar un día a lado de su
propia familia, “mis paisanos son mi familia también”, respondió un trabajador
de una ambulancia de tenía unas siglas de la SSY cuando se le preguntó si no
extrañaba estar con su familia.
Indudablemente este tipo de trabajadores al igual que los
médicos, enfermeras, camilleros y todo el personal que trabaja en un
hospital son más que héroes, son ángeles que merecen nuestro reconocimiento,
respeto y consideración y queremos creer que el gobierno tiene en la misma alta
estima esta titánica labor.
Si tu compartes esta opinión, no permitas que nadie los
agreda, son quienes menos culpa tiene de lo que está ocurriendo, recuerda, el
enemigo es invisible, y esperamos que pronto la ciencia pueda traernos buenas
noticias.
Agradecimiento a Diana M.R por compartir su testimonio,
imágenes y vídeo obtenidas por su propio medio.
Gerardo Montiel corresponsalías Q.Roo, Yuc, Campeche y
Tabasco.