Una de las peticiones contenidas en el memorándum del presidente Andrés Manuel López Obrador a los reguladores del sector energético, dado a conocer la semana pasada, podría provocar el aumento de las tarifas eléctricas.
En el documento, el jefe del Ejecutivo pide al Centro Nacional de Control de Energía (Cenace), el organismo encargado de operar el sistema eléctrico nacional, modificar la manera en que hasta ahora se despacha la electricidad para privilegiar a las plantas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), sin importar el método de producción.
Hasta ahora, la energía se sube al sistema con base en criterios económicos, es decir, de la más barata a la más cara, de acuerdo a lo establecido en la Ley de la Industria Eléctrica.
Bajo la petición presidencial, el sistema sería alimentado en el siguiente orden: la energía producida en las hidroeléctricas; lo generado en las plantas de la CFE; la energía eólica o solar de particulares y, al final, la electricidad proveniente de plantas de ciclo combinado -a base de gas- de empresas privadas.
De llevarse a cabo, esto último incrementará los costos de generación de energía y por lo tanto, las tarifas eléctricas que cobra la empresa estatal a los consumidores, coinciden especialistas del sector entrevistados.
“(El despacho económico) que tendía a favorecer las tarifas y al consumidor está quedando de lado. Si dejas de lado las renovables y las plantas de gas natural más nuevas, tu prioridad no es que la tarifa sea económica y favorecer al consumidor. Si es así como se van a tomar las decisiones, yo no veo cómo el resultado serán tarifas menores a las que tendrían las de criterios de despacho económico”, dijo Susana Carzola, socia fundadora de la consultora SICEnrgy.
De llevarse a cabo lo dicho en el memorándum, se dejará en último lugar a las plantas que utilizan gas natural como combustible, uno de los métodos más baratos de generación de energía. “Estás dejando en último lugar a las plantas más eficientes (en términos económicos) que tenemos hasta ahora en el mercado”, afirmó Paul Sánchez, fundador de Ombudsman Energía México.
De acuerdo con el especialista, si bien las tarifas podrían no subir de manera importante, sí podría aumentar la insuficiencia tarifaria de CFE. Es decir, aumentará el déficit entre los cobros que hace la compañía a sus clientes y sus gastos de operación, con lo que podría registrarse un aumento en los subsidios que da la Secretaría de Hacienda a la CFE por concepto de tarifas.
Los recursos que recibe la CFE por subsidios han crecido en 61 por ciento en el último semestre del año, de acuerdo con información de la dependencia.
“Si no aumentan las tarifas, va a aumentar la insuficiencia tarifaria y la CFE le va a terminar pidiendo más dinero a Hacienda”, dice.
Hasta ahora, las energías renovables son las de menor costo, seguido de la generada en ciclos combinados de privados, de las hidroeléctricas y las plantas propiedad de la CFE.
“¿Que subirán las tarifas? Pues claro, pero además comprometeremos décadas de crecimiento. El problema es que acabas por completo con la rentabilidad de todas las plantas privadas que hay en el país, que son muchísimas, estamos hablando de todas las que se construyeron desde 1992”, dijo Rosanety Barrios, analista del sector y exfuncionaria de la Secretaría de Energía.
Esta petición de modificar los criterios de despacho estaba contenida en un acuerdo publicado por el Cenace en abril pasado, que fue frenado por jueces en materia de competencia y la Suprema Corte de Justicia.