La sobrepoblación y el hecho de que las plantas de
tratamiento estén dentro y no en las afueras de un fraccionamiento son factores
que propician que los sumideros se rebosen, señala Omar González Mayén, socio
de la empresa Servicios González Sánchez.
En entrevista por la situación que se vive en
algunos fraccionamientos donde vecinos han reportado que los lavabos y las
tazas se rebosa, González Mayén señala que para empezar la zona norte está en
un nivel más bajo y con escarbar poco ya está brotando el agua.
“En lo que viene siendo algunos fraccionamientos
desafortunadamente hubo una sobrepoblación. Las plantas de tratamiento estaban
afuera. Cuando se empezaron a vender esos fraccionamientos, las plantas,
prácticamente estaban alejadas. ¿Qué fue lo que pasó? que hubo una
sobrepoblación y empezaron a construir y construir y las plantas de tratamiento
quedaron dentro de los complejos”.
Por eso, explica, cuando hay mal tiempo y lluvias “empiezan
a salir, obviamente, los malos olores porque ya las plantas quedaron dentro del
fraccionamiento”.
González Mayén indica que dichas plantas no tienen la
capacidad para tal magnitud. “Es el problema que está pasando ahorita, las
plantas son muy pequeñas. Si uno va a Caucel ve que hay planta 1, planta 2, planta
3… porque desafortunadamente la capacidad que tienen no es para un gran número
de población”.
El entrevistado lamenta que desafortunadamente en los casos
de varios complejos habitacionales la lluvia no ayudó. “Estás sacando agua y
sigue brotando más del manto freático”.
Además indica que una solución para que no vuelvan a rebosar
los sumideros en un futuro sería reestructurar todo el sistema hidráulico
sanitario y hacer plantas de tratamiento más grandes con mayor capacidad de
recaudación.
“La inversión sería bastante y habría que ver si las
autoridades están dispuestas a destinar cierto presupuesto para ello. A mi
juicio creo que serían plantas de tratamiento de mayor capacidad”.
González Mayén reitera que el manto freático está saturado y
que lo que se vive en Las Américas y Ciudad Caucel también se puede observar en
el Centro. “Hay pozos que hace el ayuntamiento y aun así cuando hay una lluvia
fuerte se va todo para arriba, se inundan las calles, y tú dices ‘cómo va a ser
posible si en esta calle hay cinco pozos’. Desafortunadamente el manto llega a
su nivel y todo se va para arriba y hay que esperar a que baje para que otra
vez haya la absorción.
Fuente: Megamedia
