NUEVA YORK .- La
mañana del domingo 11 de octubre, una madre de 23 años de
edad cometió un acto que podría llevarla a prisión, pues aceptó
que lanzó a su bebé desde una ventana cuando este recién acababa de
nacer, por lo que ahora el menor se encuentra hospitalizado debatiéndose entre
la vida y la muerte.
Al
parecer, Sabina Dookram dio a luz el sábado en la tarde y fue ella
misma quien confesó a las autoridades lo que había hecho antes de arrojar a su
bebé por una ventana de un metro y medio de altura: “Corté el cordón con
una tijera desde el baño… entré en pánico y lo tiré por la ventana del baño”,
relató.
Mencionó que luego
de cometer este acto inhumano no revisó el estado de salud de su bebé,
continuó bañándose y se fue a dormir; a la mañana siguiente, fueron los
vecinos quienes escucharon el llanto del menor afuera de una casa, por lo que
alertaron a las autoridades de Queens, Nueva York.
Posteriormente,
medios locales informaron que el menor fue trasladado a un hospital en estado
crítico y tuvieron que colocarle un respirador artificial para poder
mantenerlo con vida. Médicos revelaron que el bebé sufrió una lesión cerebral
traumática con sangrado e hinchazón en el cerebro y cuero cabelludo, además de
una herida abdominal con hemorragia interna.
Debido a la
gravedad del asunto, la madre tuvo que ser evaluada mentalmente y
posteriormente fue acusada de intento de homicidio, asalto y puesta en
peligro imprudente de un menor, y en caso se que resulte culpable, podría ser
condenada a 25 años de prisión.
Por supuesto, la
mujer intentó defenderse y aseguró que tuvo al bebé de la nada, aunque
aceptó que sí sabía de su embarazo, el cual fue producto de un amorío que tuvo
con un compañero de su trabajo, en el aeropuerto John F. Kennedy.
