(apro).- Vanessa Hernández Montoya desapareció desde el 14 de diciembre, pero su esposo David Arturo Nieto Mayoral levantó la denuncia hasta el jueves 17. Él montó un cuento que se le desmoronó el viernes 18 cuando la encontraron muerta, golpeada y estrangulada. Él es el principal sospechoso del feminicidio.
Vanessa fue encontrada sin vida, tirada boca arriba, con los brazos extendidos, el rostro sucio, golpeado y ensangrentado, entre los matorrales de un terreno, a cuatro calles de su casa, en la colonia Ampliación El Rosario, alcaldía Tláhuac. Tenía 29 años, era madre de dos hijos y trabajaba en una fábrica de amaranto.
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En la denuncia ante la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) se refiere que el esposo esperó hasta el jueves 17 para denunciar que llevaba cuatro días sin tener noticias sobre su paradero.
Declaró que el lunes 14, Vanessa salió a las 6:30 horas de su casa para ir a trabajar, pero en la tarde le llamaron sus compañeros para preguntar por qué no se había presentado. Espero a la noche y al ver que no regresó le llamó a su suegra, quien negó que estuviera con ella. Así que decidió esperar 48 horas para denunciar su desaparición.