La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) reveló que durante la semana pasada, en las verificaciones que realiza el organismo, detectaron un nuevo tipo de rastrillo dentro de una gasolinera, el cual permite controlar el flujo de la bomba y alterar los litros que vende a distancia y así robar a los consumidores.
En la conferencia matutina del Presidente Andrés Manuel López Obrador, el titular de la Profeco, Ricardo Sheffield Padilla, señaló que este nuevo dispositivo es mucho más sofisticado y que combatirán, e incluso, realizarán las reformas necesarias para que quien realice este tipo de prácticas pierda la concesión de la gasolinera de manera automática.
“Descubrimos en una gasolinera en Huetamo, Michoacán, el primer rastrillo versión siglo XXI, este rastrillo no lo habíamos encontrado antes. Es un rastrillo que permite que cualquier persona pueda controlar el flujo de la bomba y alterarlo a distancia, puede estar la persona en Tijuana y la gasolinera en Mérida, y poder alterar lo que da de gasolina”, aseveró.
Respecto a las verificaciones que realiza el organismo, señaló que durante la semana pasada atendieron a través de la app de Litro X Litro a 222 quejas por medio de 178 visitas formales, de las cuales siete gasolineras presentaron irregularidades.
“No se dejó verificar María Soledad Cuenca Merlo, en Atlzayanca, Tlaxcala; Cristina Rico en Villagrán, Guanajuato; y cinco estaciones en Mérida, Yucatán, vamos a investigar más a fondo, porque pareciera que ahí se están poniendo de acuerdo para impedir la acción de la Profeco”, afirmó.
El procurador señaló que con corte al 5 de marzo, la mezcla mexicana de petróleo fue de 62.40 dólares por barril, el diésel en promedio en todo el país durante la semana pasada fue de 21.22 pesos; 21.52 centavos para la premium y 20.24 pesos la regular.
El representante de la Profeco destacó que las marcas que venden más caro el combustible en promedio son Redco, Chevron y Fullgas; mientras que las más económicas en el país son G500, Exxon Mobil y Orsan.